CÁNTICOS POLÍTICOS EN LAS FIESTAS DE BURGO DE EBRO

El alcalde socialista dice que también le gusta la fruta en el pregón, cuando los vecinos cantan ‘¡Pedro Sánchez, hijo de P#t@!’

Es la 'canción del verano' 2025 Y persigue al marido de Begoña y a sus acólitos, sÚbditos y manporreros allá dónde vayan.

Es la ‘canción del verano’ 2025.

Y persigue al marido de Begoña y a sus acólitos, sÚbditos y manporreros allá dónde vayan.

El ambiente festivo en Burgo del Ebro prometía una tarde de júbilo, banderolas y música tradicional.

Sin embargo, en pleno pregón desde el balcón del ayuntamiento, la celebración se tornó inesperadamente mediática.

El alcalde socialista, Vicente Royo Martínez, se encontró ante una plaza abarrotada y un cántico que resuena por toda España este verano: “¡Pedro Sánchez, hijo de puta!”.

Frente a la incomodidad que provoca en los del PSOE este tipo de situaciones, Royo optó por una estrategia insólita: micro en mano, respondió a sus vecinos con un “No vamos a mezclar churras con merinas porque a mí también me gusta la fruta”.

La frase descolocó a unos y divirtió a otros.

Lo cierto es que el vídeo del momento no tardó en circular como la pólvora por redes sociales, convirtiendo al pequeño municipio zaragozano en epicentro accidental de la actualidad política nacional.

La reacción del alcalde desató en el respetable en risas y comentarios jocosos.

A día de hoy, 16 de agosto de 2025, Burgo del Ebro es trending topic y su regidor protagoniza titulares en los medios digitales.

Vicente Royo, alcalde socialista de Burgo de Ebro

El origen del “me gusta la fruta”: ¿de dónde viene la expresión?

La frase no es nueva para quienes siguen la política nacional. “Me gusta la fruta” se popularizó gracias a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, que la empleó para esquivar un insulto durante una intervención pública.

Desde entonces, se ha convertido en una especie de comodín humorístico para responder a ataques o palabras malsonantes sin entrar al trapo.

En este caso, Vicente Royo Martínez se apropió irónicamente de esa fórmula, demostrando que el ingenio puede ser arma política incluso para un alcalde socialista rodeado por cánticos nada amables hacia el presidente Pedro Sánchez.

Preguntado por los medios tras el episodio, Royo restó importancia al incidente: “Son cuatro críos… No pasa nada. Se paró y todo perfecto. En el pueblo no hay ningún problema ni pelea política. Hay buen ambiente”. La naturalidad con que despachó el asunto evidencia el carácter distendido con que se vive la política municipal en muchos pueblos españoles.

La canción del verano: cuando “Pedro Sánchez, hijo de puta” arrasa en fiestas populares

El fenómeno no es exclusivo de Burgo del Ebro. Este verano, el cántico “Pedro Sánchez, hijo de puta” ha sido coreado por jóvenes (y no tan jóvenes) en plazas y verbenas desde Cádiz hasta Girona. Se ha convertido —para bien o para mal— en la auténtica canción del verano española. A modo de lista:

  • El cántico ha aparecido espontáneamente en fiestas patronales y eventos deportivos.
  • Las redes sociales amplifican cada nueva versión: desde coros multitudinarios hasta adaptaciones musicales.
  • El fenómeno refleja un clima político polarizado y una tendencia creciente hacia la protesta lúdica.

En Aragón, hace apenas una semana se vivió un episodio similar durante las fiestas de San Lorenzo en Huesca. Allí fue una concejala del Partido Popular quien interrumpió el pregón ante los gritos contra Sánchez, siguiendo instrucciones directas de autoridades autonómicas para calmar los ánimos.

Reacciones políticas y sociales: entre la crítica y el humor

Las respuestas institucionales varían entre minimizar el asunto (“son cosas de fiestas”) y analizarlo como síntoma de crispación social. Para algunos analistas políticos, lo ocurrido muestra cómo los símbolos partidistas son utilizados como válvula de escape generacional; para otros, evidencia el desgaste político del Gobierno central entre ciertos sectores.

Vicente Royo Martínez gobierna El Burgo de Ebro desde 2019 con mayoría absoluta —en las últimas municipales obtuvo un contundente 54,3% de los votos y siete concejales sobre once— lo que le da margen para afrontar estos episodios sin mayores sobresaltos internos.

El propio alcalde reconoce que después del pregón habló con los protagonistas: “Son familias del pueblo, amigos… Luego hablas con ellos y te dicen ‘Alcalde, esto es viral, no va contra nadie’”. Este tipo de declaraciones muestran cómo muchas veces las protestas pierden su carga ideológica original y se convierten en rituales festivos.

Curiosidades sobre el caso: viralidad rural y memes nacionales

  • El vídeo fue visto por decenas de miles en apenas unas horas.
  • La frase “me gusta la fruta” figura ya entre las expresiones políticas más repetidas este año.
  • El Burgo del Ebro ha sido mencionado más veces esta semana en redes sociales que durante toda su historia reciente.
  • Algunos usuarios han creado memes comparando al alcalde con personajes televisivos célebres por sus salidas irónicas.
  • La expresión “no vamos a mezclar churras con merinas” recupera su lugar como recurso clásico ante polémicas públicas.

En definitiva, lo ocurrido en Burgo del Ebro confirma que España es capaz de convertir cualquier momento político tenso en un espectáculo viral donde el humor supera al insulto. Y si no hay consenso sobre Pedro Sánchez… siempre quedará la fruta como símbolo transversal.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído