La última semana ha sido fenética para doña Letizia y Felipe VI que, tras asistir a la entronización del emperador Naruhito en Japón, rehicieron las maletas para partir hacia Corea. Allí, fueron nombrados ‘Ciudadanos Honorarios’ de Seúl y tuvieron oportunidad de conocer de cerca el sector tecnológico del país, en concreto, visitaron el parque científico de la compañía LG.
Durante la mañana del jueves 24 de octubre de 2019, Letizia y la Primera Dama de la República de Corea, Kim Jung-sook, llegaron a la Sede de la Agencia de Promoción de Inversión Comercial de la República de Corea (KOTRA) para hacer efectiva una reunión dirigida hacia la mejora del estilo de vida de personas desfavorecidas y potenciar la investigación orientada a la pronta detección de enfermedades como la malaria. Para la ocasión, Letizia apostó por un estilo ‘working’ con una falda roja en cuero firmada por Hugo Boss (399 euros) que combinó con blusa blanca bordada de Carolina Herrera y stilettos y clutch en el mismo tono que la falda.
Posteriormente, los Reyes visitaron el Ayuntamiento de Seúl, donde se encontraron con su alcalde, Park Won-Soon y, ya por la tarde, hicieron acto de presencia en el LG Sciencepark y la Innovation Gallery. Doña Letizia se fusionó con el ambiente innovador y cambió el estilismo de la mañana por un llamativo vestido camisero estampado de corte midi que lleva la firma de Massimo Dutti (99,95 euros). En tono azulado y con cuello redondo y manga larga, la Reina acertó con el estilo lady.
Y el fin de la jornada llegó. Y, con él, la cena de gala ofrecida por el presidente surcoreano, Moon Jae-in (66), en la Casa Azul de Seúl. La experiodista arrasó con un vestido en seda y tul rosado con bordados, manga francesa y terminadl en volante de la firma Temperley London (2.990 euros). Un original estreno que tendrá amantes y detractores a partes iguales y que remató con unos pendientes de rubíes y diamantes con forma de paloma que pertenecen a la reina Sofía (80).