Céntrico, acogedor y con precios realmente atractivos, el último restaurante de Ignazio Deias, es una pista imprescindible para los amantes de la gastronomía con historia
Cuentan que cruzar el puente de Brooklyn (Bruccolino según lo pronunciaban los emigrantes italianos) tiene algo de turbador y que parte de su magia reside, como dice el escritor Paul Auster, en que «es Nueva York sin ser Nueva York». Su mezcla de culturas y sabores lo convierten en uno de los destinos más deseados.
Ahora, atravesar el mítico puente y saborear una parte de su gastronomía está más cerca que nunca en Bruccolino, donde se pueden probar auténticas recetas ítaloamericanas… ¡y llevárselas a casa!
Brucculino, el nuevo desafío de Ignazio Deias, un acogedor restaurante que combina la esencia de la cocina tradicional de los emigrantes de Italia con las influencias culinarias de las que se impregnaron en Estados Unidos.
El resultado es una carta realmente divertida, que con el nombre de sus platos rinde homenaje a grandes personajes con ascendencia italiana: entrantes como la Melanzane alla Sinatra, milhojas de berenjena, tomate y queso; la Al Caponata, guiso agridulce de berenjenas y más verduras o la Madonna che insalata!, ensalada con rúcola, pera y parmesano.
Entre las creaciones que ofrece también hay risottos, carnes y pastas tan auténticas como los Fetuccine Alfredo, en salsa de nata y parmesano; los Spaguetti with meatballs, con albóndigas y tomate o los Gnocchi alla Stallone, ñoquis de patata con queso azul gorgonzola. También destacan hamburguesas como la De Niro´s gourmet, con setas y trufa, o la Tarantino´s, con tomate picante. Sin olvidar la excelente selección de pizzas. La Rodolfo Valentino, con tomate, mozarella y verduras o la Volareeeeeeeeeee!!!, blanca con queso de oveja y crema de trufa negra.
Además, los menús Bruc (11,80 €) y Brucculissimo (15,80 €) son perfectos para degustar la variada oferta de este establecimiento. Disponibles solo durante el mediodía, incluyen pan y aperitivo, un primero, un segundo y un postre.
Para acompañar todas estas propuestas y como marca la tradición, Ignazio se ha encargado de escoger personalmente las referencias con las que cuenta la carta de vinos. Procedentes de diferentes regiones de Italia (Lazio, Toscana, Sicilia, Puglia…), potencian la personalidad de cada receta y despiertan su carácter mediterráneo.
Pero hay mucho más…porque aquellos que prefieran disfrutar de la mejor gastronomía de Little Italy en la oficina, en casa, en la terraza con amigos, etc. pueden hacerlo gracias a un servicio de take away… ¡¡que regala una bebida con cada plato!!
Rústico y cálido, este restaurante es ideal para los amantes de la cocina con historia. Sus paredes de madera están salpicadas de cuadros con fotografías de los personajes ilustres que dan nombre a los platos, y sus mesas, cubiertas por manteles de cuadros rojos y blancos, evocan el ambiente del barrio neoyorquino, retratado por Hollywood en decenas de películas. Ahora, saborear el sueño americano es posible en pleno Chamberí.
Brucculino tiene capacidad para 50 comensales y el precio medio es de 18 €. Abre todos los días de la semana de 13.00 a 16.00 h. (los domingos hasta las 16.30 h.) y de 20.30 a 23.30 h. Jueves, viernes y sábado, la cocina permanece abierta hasta las 00:30 h.
Trafalgar, 17. Madrid
Tel. 91 445 85 39