Muchos ya sabíamos, desde hace años, de las andanzas de Forestalia en Aragón, depredando los paisajes naturales más turísticos, como si la región fuera suya…
También de los oscuros manejos de “san” Lambán con los Sumelzo, amigos suyos de toda la vida, y a cuya hija Susana Sumelzo, actual secretaria de estado, nombró, a dedo, secretaria general técnica de la Diputación Provincial de Zaragoza, cuando era su presidente, cargo absolutamente absurdo, que se solapaba a los altos funcionarios de los cuerpos nacionales de secretarios, interventores y tesoreros, ingresados por oposición libre.
Pero lo que más me deprimió fue ver que la prometida comisión de investigación en las Cortes de Aragón de los manejos de Forestalia, Lambán y Sumelzo, se quedó en agua de borrajas, ante la ineficacia o incompetencia de la citada comisión.
¡Y es que no hay peor ciego que el que no quiere ver!
Desde 2023 manda el PP en Aragón, en solitario, dada la espantada de Vox el año pasado, hartos de ser toreados por Azcón, y lamentablemente vemos que Forestalia sigue haciendo lo que le da la gana, y nadie le para los pies.
Muy pocas personas se han atrevido, hasta la fecha, a criticar y denunciar estos manejos de Forestalia y Sumelzo, y debo decir, en honor a la verdad, que una de ellas, y de las más constantes, ha sido don Federico Jiménez Losantos.
Pero lo que algunos no sabíamos, pero intuíamos, era la conexión de ambos grupos de empresas (850, nada menos) con la PSOE, a través de Servinabar, el “alquiler” de funcionarios corruptos, y los manejos fraudulentos de informes del instituto aragonés de gestión ambiental, INAGA, y del Ministerio
Que comandaba Teresa Ribera, la mujer pegada a una nariz, y ahora la meliflua y superpija sucesora, Sara Aaegesen que es tan inepta como su predecesora, aunque desconozco si igual de corrupta.
Presuntamente, claro.
Y uno, que es malpensado, por la edad y la vida, cree que hay mucho untamiento, y que algún –o algunos- partidos políticos han recibido “lo suyo”, para hacer la vista gorda a todos los desmanes que se están perpetrando contra nuestro territorio, en una política de tierra quemada, y de pan para hoy, y hambre para mañana.
En efecto, ¿Alguién vendrá a veranear, de fin de semana, a jubilarse, comprará o alquilará una segunda residencia en comarcas destruidas por esos molinazos, a la salida del pueblo…?
Echo en falta que Azcón mande realmente en Aragón, y ponga a Forestalia, a los Sumelzo y al PSOE, en su sitio.
¿O es que sus políticas son meramente continuistas de las de Lambán y el régimen comunista sanchista…?
