En estos momentos abrámonos a la gracia de Dios, no dejemos de evangelizar, de anunciar el evangelio, de trabajar en la viña del Señor con los más probres y los últimos, no dejemos de estar al lado
(Avan).- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha expresado hoy a los afectados por el terremoto de Méjico y por los recientes huracanes de Puerto Rico y las Antillas, que «la Iglesia en Valencia está a vuestro lado» y ha llamado a la diócesis a rezar por ellos.
Al término de la misa que ha presidido este mediodía en la Catedral de Valencia, por las víctimas del terremoto y de los últimos huracanes, a la que han asistido numerosos mejicanos, cubanos y puertorriqueños residentes en Valencia, el cardenal les ha indicado también que «tenéis la Iglesia de Valencia muy unida también a vuestro dolor y a vuestra esperanza. seguimos rezando por vosotros, por las víctimas de los terremotos y huracanes para que se recompongan aquellos países y encuentren verdaderamente la solidaridad de todos, el acompañamiento de todos y la esperanza».
En su homilía, también ha exhortado los fieles diocesanos a que «no dejemos de estar con los que más sufren en estos momentos, no dejemos de hacer el bien, y de forma muy especial con nuestras plegarias a Dios para presentarles las necesidades de los demás.»
«En estos momentos abrámonos a la gracia de Dios, no dejemos de evangelizar, de anunciar el evangelio, de trabajar en la viña del Señor con los más probres y los últimos, no dejemos de estar al lado en estos momentos de Méjico, Cuba, Santo Domingo, Puerto Rico y los diversos países de las Antillas».
Además ha recordado, al insistir en las plegarias por los afectados, que es «en la oración donde expresamos nuestra prontitud para estar con Dios y para presentarle las necesidades de los demás»:
De igual modo, y durante las oraciones de los fieles en la misa, se han elevado peticiones «para que la Iglesia sea instrumento de consuelo entre las víctimas de los terremotos y huracanes registrados y muestre la infinita misericordia de Dios«.