Sergio Ramos sigue en el ojo del huracán. El de Camas cerró un último año maquillado por el tanto en la final de la Champions, pero plagado de situaciones puntuales que enervaron a Rafa Benítez, primero, y a Zidane, después.
Las escapadas del central a Sevilla, unido a la falta de rendimiento a la altura de la ficha firmada antes del arranque del último curso, más lesiones/sancione que apartaron a Ramos del equipo más minutos de los que disputó como capitán, alertaron a un Madrid que frenó la maquinaria tras la Undécima en Milán.
En el Real es un secreto a voces que Ramos era uno de los grandes señalados de los despachos para hacer el petate a final de curso. Las astronómica ficha firmadas por el presidente tras una negociación plagada de avisos/amenazas colocó al ‘4’ del Madrid bajo la lupa.
Las famosos ‘listas negras’ de los días más duros del Real de Benítez las encabezaba Sergio.