Chris Rea ha partido, dejando un vacío en las carreteras nevadas que adornan la Navidad británica.
Su familia comunicó el lunes su fallecimiento en un hospital, tras lidiar con una enfermedad corta, justo cuando su canción más icónica sonaba en radios y listas de reproducción del mes de diciembre.
Nacido en 1951 en Middlesbrough, al noreste de Inglaterra, este hijo de una familia ítalo-británica transformó el bullicio de los atascos invernales en un himno eterno que evoca la añoranza de regresar a casa.
El artista, cuya voz rasposa y su guitarra evocaban paisajes brumosos del invierno inglés, alcanzó la fama en los años 80 con éxitos como Fool (If You Think It’s Over) y Let’s Dance. Sin embargo, fue Driving Home for Christmas, lanzada originalmente en 1986 como cara B del sencillo Hello Friend y regrabada en 1988 para el álbum recopilatorio New Light Through Old Windows, la que lo consagró.
Esta melodía, que comienza con una introducción jazzy del teclista Max Middleton y un arreglo que recuerda a los villancicos de los años 50, se ha convertido en un clásico navideño: se ha colado en el Top 40 británico cada año desde 2007 y ha sido utilizada en anuncios de marcas como Marks & Spencer o Iceland.
Greatest christmas song ever.
RIP Chris Rea 🕊️ ❤️
— The Rock Revival (@TheRockRevival_) December 22, 2025
Rea nunca tuvo la intención de crear una canción navideña. La chispa surgió en 1978, cuando se encontraba atrapado en el tráfico entre Abbey Road Studios en Londres y Middlesbrough. Su esposa lo recogía en un Austin Mini para ahorrar dinero, ya que la discográfica no cubría su billete de tren. Bajo la nieve, observando a otros conductores «tan miserables», comenzó a tararear: «We’re driving home for Christmas». Aunque inicialmente pensó en Van Morrison como inspiración, fue años después cuando, al probar diferentes pianos, dio forma a la canción. «Es la versión sobre ruedas de un villancico», confesó en entrevistas a BBC Radio 4 y The Guardian. No fue hasta 2014 que se atrevió a interpretarla en vivo por primera vez en el Hammersmith Odeon, animado por su equipo: «Si voy a cantar esta maldita canción, lo haremos bien».
Su trayectoria musical está marcada por más de 20 álbumes y millones de copias vendidas por toda Europa. Discos como The Road to Hell (1989) exploraron el blues rock con toques autobiográficos, reflejando su amor por las autopistas y su vida nómada. A pesar de haber sido diagnosticado con pancreatitis en 2001 —una enfermedad que casi le cuesta la vida— luchó contra esta dolencia durante años sin dejar de girar ni grabar. Su influencia va más allá de la música pop: su tema festivo une generaciones al aparecer en Gavin & Stacey de la BBC, donde personajes galeses lo cantan rumbo a Essex o se utiliza en campañas solidarias con Shelter para ayudar a personas sin hogar durante las festividades.
Sus colegas y fans lo recuerdan como un artista humilde. «Chris capturó el verdadero espíritu navideño; no ese idealizado, sino el de atascos y anhelos», evocó un productor cercano por redes sociales tras conocerse la noticia. En su comunicado familiar se solicitó privacidad: «Agradecemos todo el amor mostrado hacia su música durante décadas». El legado de Rea permanecerá vivo cada vez que sus canciones resuenen; irónicamente, su éxito sonaba el mismo día de su partida, recordándonos que aunque haya luces rojas y frío invernal, el camino hacia casa siempre trae consigo gratos recuerdos.
Trayectoria y obra de Chris Rea
Nacido el 4 de octubre de 1951 en Middlesbrough, Inglaterra, dentro de una familia ítalo-británica —su padre regentaba una heladería— Chris Rea creció en un entorno modesto que moldeó su ética laboral. Aunque no hay información precisa sobre su educación formal al inicio de su carrera musical, recibió formación autodidacta influenciada por el blues y rock de los años 60. Comenzó tocando guitarra en pubs locales antes de firmar con Magnet Records durante los años 70.
Entre sus hitos profesionales destaca el debut con Whatever Happened to Benny Santini? (1978), aunque fue durante los años 80 cuando alcanzó el éxito masivo. Algunos álbumes clave incluyen:
- Tennis (1980), donde logró su primer hit con I Can’t Dance.
- Fool (If You Think It’s Over) (1978), que alcanzó el Top 20 tanto en Reino Unido como EE.UU.
- The Road to Hell (1989), un doble álbum conceptual sobre la vida carretera con sencillos como The Road to Hell (Part 2).
- Auberge (1991) y God’s Great Banana Skin (1992), trabajos que consolidaron su estilo blues-rock.
Las obras más reconocidas giran principalmente alrededor de Driving Home for Christmas, pero también destacan títulos como On the Beach (1986), Julia (1992) y colaboraciones para bandas sonoras. Su discografía supera los 70 millones de discos vendidos globalmente, especialmente arraigados en Europa continental.
En cuanto a premios y reconocimientos, aunque no abundan las listas exhaustivas recientes sobre él, su impacto se refleja claramente a través del streaming: Driving Home for Christmas acumula miles de millones de reproducciones. Recibió nominaciones a los Brit Awards y certificaciones platino en varios países; además fue galardonado con el Ivor Novello por sus contribuciones a la música británica. En 2016, The Guardian destacó su autenticidad.
En lo familiar, estuvo casado con Joan Rea desde 1977; juntos tuvieron dos hijos: Matthew —quien colaboró musicalmente con él— y una hija. Superó un cáncer pancreático en 2014 tras batallar varios años con problemas de salud; esto le llevó a pausar giras pero no le impidió seguir componiendo.
Rea grabó más de 20 álbumes estudiados fusionando géneros como blues, jazz y pop. Su último trabajo relevante fue una remasterización del clásico navideño Driving Home for Christmas lanzada en 2019. Sus conciertos eran maratones íntimos donde compartía anécdotas sobre sus viajes que lograban conectar al artista con sus seguidores.
Su música perdura entre listas eternas. La voz rasposa como un motor lejano nos lleva siempre hacia casa cargados con mil recuerdos reflejados en el retrovisor. En Middlesbrough y más allá, las luces navideñas brillarán un poco menos sin él.
