En medio de una tempestad política, una reveladora exclusiva de Carlos Cuesta en Libertad Digital ha encendido todas las alarmas dentro de la Guardia Civil y del Gobierno.
La situación en torno a Leire Díez, conocida ya como “la fontanera del PSOE”, ha destapado una red de reuniones, ofrecimientos y maniobras de presión que involucran directamente a la directora del instituto armado, Mercedes González, así como a altos mandos de la Benemérita.
Estos hechos, que han salido a la luz en las últimas 48 horas, no solo abren un campo judicial y político, sino que también agravan la crisis de confianza sobre la independencia de las instituciones.
De la militancia socialista a las reuniones secretas
Leire Díez, quien fue alto cargo en Correos y es cercana a Santos Cerdán, ha pasado de ser una figura desconocida para el público general a convertirse en protagonista de grabaciones filtradas y encuentros muy comprometidos con miembros de la Guardia Civil.
Según los documentos a los que ha tenido acceso Libertad Digital, estas reuniones se llevaron a cabo en marzo de 2025, cuando Mercedes González ya ocupaba el cargo de directora general desde el 17 de septiembre de 2024.
Durante esos encuentros, Díez habría ofrecido a varios interlocutores un trato preferente dentro del cuerpo e incluso planteó la posibilidad de nombrar a algunos como asesores personales de la propia directora.
No fueron simples diálogos informales. Las actas y audios filtrados documentan cómo Díez solicitaba información comprometida sobre mandos de la Unidad Central Operativa (UCO), mostrando un interés particular por el teniente coronel Antonio Balas.
Su objetivo era desacreditar a quienes investigaban causas que afectan a figuras del entorno socialista, desde el caso Koldo hasta las pesquisas relacionadas con Begoña Gómez y David Sánchez Pérez-Castejón, esposa y hermano del presidente del Gobierno.
Mercedes González, en el centro del huracán
La figura de Mercedes González no es un mero espectador en esta trama. Los documentos y testimonios hacen referencia constante a su papel, con menciones explícitas sobre reuniones y llamadas durante los encuentros entre Díez y los mandos policiales. Uno de los pasajes más impactantes revela que, tras Semana Santa de 2025, se habría llevado a cabo un encuentro personal entre Díez y González para discutir situaciones relativas a ciertos agentes y posibles nombramientos “a dedo”. Además, se menciona un ofrecimiento directo para que un confidente pasara al gabinete de González como asesor, aunque finalmente esta propuesta fue rechazada.
Las reacciones dentro de la Guardia Civil han sido inmediatas. Las principales asociaciones profesionales, especialmente Jucil, han criticado el “silencio injustificable” por parte de la directora ante este escándalo. Exigen una defensa pública del trabajo realizado por la UCO, cuya credibilidad consideran amenazada por falta de explicaciones y creciente descontento interno. El ambiente tenso se extiende por unidades en toda España.
El papel del comandante Rubén Villalba y los tentáculos de la trama
Otro nombre relevante que surge en esta exclusiva es el del comandante Rubén Villalba, quien fue interlocutor directo de Díez durante algunas reuniones clave. Según testimonios y registros obtenidos, durante un encuentro en Leganés el 10 de marzo de 2025 intercambiaron información sobre investigaciones abiertas bajo estrictas medidas de seguridad: móviles apagados e inspecciones previas incluidas. Al concluir el encuentro, Díez verificó que había recibido al menos dos llamadas provenientes de Mercedes González, lo que añade un nivel adicional de sospecha sobre su conocimiento e implicación en las maniobras llevadas a cabo por la ex militante socialista.
Los documentos y audios filtrados indican que el propósito principal de Díez era claro: “desmontar la Guardia Civil” y “echar por tierra las causas judiciales” que afectaban al PSOE. Así lo reflejan las transcripciones accesibles para los medios. Por su parte, Villalba dejó constancia al señalar que “Leire y los altos mandos del Gobierno necesitan pruebas objetivas para poder atacar a la Guardia Civil”.
El Gobierno y el PSOE, en modo negación
Desde el Partido Socialista han negado rotundamente cualquier tipo de vinculación orgánica o profesional con Díez. Aseguran que se trata simplemente de una militante sin responsabilidad ni encargo formal alguno. Además, califican las informaciones publicadas como una “campaña premeditada” contra ellos. Sin embargo, el goteo constante de detalles relevantes ha generado estupor tanto en Ferraz como en La Moncloa.
En paralelo, los partidos opositores han exigido aclaraciones urgentes así como responsabilidades claras. Consideran que este caso pone al descubierto una preocupante injerencia política en las fuerzas armadas. La ausencia total de declaraciones públicas por parte Mercedes González desde que estalló el escándalo solo ha contribuido a incrementar las sospechas y malestar dentro del instituto armado.
¿Hasta dónde llega la trama? Dudas, certezas y un país en vilo
La exclusiva publicada por Libertad Digital ha dejado muchas preguntas sin respuesta. ¿Cuál fue realmente el alcance operativo detrás del movimiento llevado a cabo por Díez? ¿Se realizaron más ofrecimientos relacionados con cargos o favores para obtener información sensible? ¿Por qué ha optado la dirección de la Guardia Civil por mantener silencio?
Mientras tanto, esta crisis se suma a las históricas reivindicaciones salariales pendientes entre los agentes. Muchos consideran estas demandas como una cortina para desviar atención ante lo grave del momento actual. Las asociaciones siguen insistiendo en necesidad urgente por mayor transparencia así como defensa del trabajo investigativo realizado por la UCO.
Curiosidades y detalles llamativos del caso
- El caso ha sido denominado con diferentes nombres en los medios: “caso UCO”, “caso Leire” e incluso “caso Fontanera”, haciendo referencia al papel presuntamente intermediario desempeñado por Díez para resolver problemas relacionados con el PSOE.
- Las grabaciones reveladoras incluyen diálogos dignos del mejor guion cinematográfico: “No necesito a todo el mundo. Necesito a Balas”, llegó a afirmar Díez durante uno de esos encuentros filtrados.
- La polémica ha estallado justo cuando hay luchas políticas por controlar efectivamente a la Guardia Civil; esto ocurre también dentro un contexto marcado por continuas demandas salariales .
- Mercedes González asumió su cargo en septiembre del 2024 justo después dimisión su antecesor durante el estallido del caso Koldo; esto añade continuidad temporal ante crisis recurrentes dentro Ministerio Interior .
- Los tentáculos alcanzan hasta empresarios bajo investigación por delitos económicos; abogados involucrados en casos mediáticos e incluso antiguos funcionarios públicos; lo cual demuestra cómo muchas veces realidad política española supera ficción.
