La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, cree que una relación «tan cercana e intensa» como la mantenida por el presidente del PSE/EE, Jesús Eguiguren, con Batasuna, con sus «potenciales asesinos y perseguidores, tritura cualquier conciencia».
En una entrevista con Efe, Pagazaurtundúa afirma que no fue «lo más profesional» por parte del Gobierno del PSOE «mandar a negociar» con ETA a «alguien que estaba tan implicado subjetivamente» la izquierda abertzale desde varios años antes.
Opina que el libro de Eguiguren publicado bajo el título «ETA, las claves de la paz», que se presentará la próxima semana, es «una manera de justificar actuaciones tan complicadas e incoherentes desde el punto de vista anímico, y algo más que discutibles desde el punto de vista político».
«Muchos de los aspectos que Eguiguren negoció van mucho más allá de lo que los partidos políticos pueden hacer», sostiene la presidenta de la FVT, cuyo último cargo político fue de concejal del PSE/EE en el municipio guipuzcoano de Urnieta, y asegura que las revelaciones le han servido para «encajar piezas de un puzzle político» que no acababa de entender y cuyo origen sitúa en la crisis de los socialistas vascos que llevó a la dimisión de Nicolás Redondo Terreros como secretario general en 2002.
Con su caída, explica, Eguiguren tomó las «riendas ideológicas» del partido y «empezó a enredar con Batasuna» a espaldas de los ciudadanos, en lo que Pagazaurtundua tacha como una «falta de transparencia absoluta».