¿Se cederá con Cataluña como se cedió con la banda terrorista ETA?


Los críticos de Rajoy acostumbran a decir que es un vago, que no hace nada y que le encanta estar tumbado a la bartola envuelto en las volutas de humo de su puro. Ciertamente, con la mayoría absoluta que ostenta, la más holgada de toda la historia de la democracia, podía haber acometido unas cuantas reformas, algunas muy necesarias, a la vez que prometidas y esperadas. Al final, me he ido convenciendo de que las opiniones no estaban basadas en simples rencillas y envidias, lanzadas por los enemigos políticos del propio partido, sino en una realidad que nos ha estallado en la cara a todos los españoles, y con más fuerza a los damnificados votantes del PP, entre los que me encuentro. He dicho muchas veces que solo me había faltado pedir públicamente, en cámara, el voto para el PP, para que España resurgiera de las cenizas provocadas por el incendiario Zapatero y su pandilla de pirómanos. Por eso me resquema tanto la herida. Por eso es tan largo mi periodo de duelo. No voy a repetir la lista de despropósitos que el Gobierno tiene en su haber, porque lo vengo haciendo desde la misma semana de la investidura con la subida del IRPF, inicio de la pendiente resbaladiza de una traición que continúa.

Porque lo que Mariano Rajoy hace como un auténtico profesional, es mentir y conspirar, cabildear e incluso hacer lobby contra sí mismo y contra España. Díganme si no, qué pintan Obama, Merkel o Cameron opinando sobre la independencia de Cataluña. Como no sabemos gobernar, que nos gobiernen ellos, ¿no? El problema de los nacionalismos/separatismos/independentismos corresponde a los estados, y cada cual debe resolver el suyo. Pero a Rajoy le gusta hacer “pandi” para sentirse apoyado, como hacen los masones y los de las sectas en general. Quizá no sabe que los Hijos de la Viuda también se traicionan entre ellos. Véase la revisión histórico-forense de la muerte del General Prim, por citar algo cercano y nuestro.

Lo cierto es que mientras el candidato Albiol se quema con toda su artillería conservadora, Mariano Rajoy conspira y, por boca del ministro de Exteriores, García Margallo, anuncia como solución a las reivindicaciones secesionistas, la reforma de la Constitución “para encajar el hecho catalán”. Esto incluiría un cambio del sistema de financiación por el que se cedería prácticamente al completo el IRPF a Cataluña. La abolición del temido artículo 155 –inaplicable, según parece— sería otro de los regalos, con el cual la espada de Damocles dejaría de pender sobre Cataluña, o cualquier otra comunidad que se ponga farruca, ampliando así el poder territorial en detrimento del Estado. ¿No recuerda esto al pacto con ETA? Con la banda terrorista se cedió, saltándose el Estado de Derecho, y se le dio lo que venía reivindicando con bombas y tiros en la nuca, y ahí los tenemos sentados en los escaños del Congreso y gobernando ayuntamientos y diputaciones. Gracias a la cobardía y al bajísimo perfil de nuestros gobernantes. ¡Vaya políticos de saldo que tenemos!

“Rajoy es capaz de vender su alma al diablo” no es un simple titular, sino una realidad palpable. Posiblemente ya la haya vendido. Lo vemos por sus frutos. Los obispos lo apoyan porque le ha funcionado la estrategia y ha conseguido inyectar la toxina del miedo. La historia de los mártires de la Iglesia deja al descubierto con todo lujo de detalles la persecución de los católicos en España por pare del salvaje Frente Popular. Sus descendientes, un poco peores e incluso más sanguinarios, los tenemos gobernando ayuntamientos y marcando hojas de ruta. Ellos no tienen que vender nada porque su alma pertenece al inframundo desde antes de nacer. ¡¡¡Gracias al Gobierno del Partido Popular están donde están!!!, todo hay que decirlo.

¿Pero hay que plantearse Partido Popular o Podemos? Pues no. No debemos resignarnos al continuismo del gobierno del PP ni a la desvergüenza de tener como representantes a esta patulea de gente antisistema, que dicen no ser casta, pero que se derriten ante el sistema y la casta para subirse sueldos y hacer uso de privilegios. El coletas, que padece hidrofobia, Kichi, el “chulo que castiga” –como dice Salvador Freixedo en su soneto–, la meona de Brandenburgo, la Mestre, asaltante de capillas y su padre, la Carmena y la Colau son dignos personajes de libreto barato. ¡Y ahí están, produciéndonos “alipori” cada vez que los vemos. Gracias, Rajoy, por traernos a esta tropa.

___________________
Por Magdalena del Amo
Periodista y escritora, pertenece al Foro de Comunicadores Católicos.
Directora y presentadora de La Bitácora, de Popular TV
Directora de Ourense siglo XXI
[email protected]
Suscripción gratuita
.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Magdalena del Amo

Periodista, escritora y editora, especialista en el Nuevo Orden Mundial y en la “Ideología de género”. En la actualidad es directora de La Regla de Oro Ediciones.

Lo más leído