La política española vive un nuevo episodio de alta tensión en pleno verano de 2025. El llamado Frente Popular, ese conglomerado de partidos de izquierda y nacionalistas que mantiene en la Moncloa a Pedro Sánchez, vuelve a ser protagonista. La alianza, que integra a figuras tan dispares como Gabriel Rufián (ERC) y Arnaldo Otegi (EH Bildu), se enfrenta a grietas internas y a la presión creciente de la oposición, en medio de un contexto marcado por los escándalos de corrupción y el auge de la polarización.
Mientras la derecha pone el foco en la supuesta fragilidad del Gobierno, el bloque progresista ensaya una coreografía de pactos, amenazas y equilibrios que, por ahora, ha evitado el colapso. Eso sí, el precio de la supervivencia política se paga caro: concesiones constantes, tensiones territoriales y una opinión pública que observa con creciente escepticismo el rumbo de la legislatura.
Las piezas del rompecabezas: Sánchez, Rufián y Otegi
Pedro Sánchez, líder del PSOE, se ha convertido en el gran funambulista de la política nacional. Siete años en el poder y una habilidad casi circense para tejer alianzas con los actores más improbables. En el tablero, destacan Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso y voz afilada del independentismo catalán, y Arnaldo Otegi, coordinador de EH Bildu y símbolo para parte de la izquierda abertzale.
Este trío, junto a otros socios menores, ha logrado sostener una mayoría parlamentaria que, si bien a menudo parece a punto de resquebrajarse, resiste los envites. De hecho, aunque los Comunes han amenazado con abandonar el gobierno y Compromís exige una moción de confianza, la aritmética parlamentaria sigue siendo implacable: nadie quiere quedarse fuera del reparto de poder.
- Sánchez necesita los votos de ERC y Bildu para sacar adelante cada proyecto clave.
- Rufián juega a la ambigüedad, tensando la cuerda sin llegar a romperla.
- Otegi aprovecha el veto del PP para presentarse como adalid del antifascismo, mientras negocia discretamente sus apoyos.
Corrupción, desgaste y el eterno retorno de la desconfianza
El contexto no ayuda. El PSOE se ve salpicado por nuevos casos de corrupción, con la reciente salida de Santos Cerdán como secretario de Organización tras el informe de la UCO y la presión de sus propios socios. El PNV observa con distancia, exigiendo garantías de que el escándalo no es sistémico y advirtiendo de que hay líneas rojas que no se pueden cruzar.
La percepción ciudadana, por su parte, oscila entre el hastío y la ironía. No faltan quienes comparan la situación con una serie interminable de intrigas palaciegas. La frase recurrente en los mentideros políticos es que «los socios necesitan más a Sánchez que Sánchez a los socios», un juego de supervivencia donde la alternativa sería quedarse en la oposición, o peor, en el paro político.
Sobre este y otros asuntos se hablará este 23 de julio de 2025 en ‘La Burbuja’ (Periodista Digital), el espacio dirigido y presentado por Josué Cárdenas.