El Estatuto de Cataluña está en manos de 10 personas justas
Dos años después de que su nombre empezara a aparecer como uno de los candidatos para renovar el Tribunal Constitucional, Enrique López confiesa sentirse como «un pretexto que algunos buscan» para conseguir aquello que sea rentable políticamente.
López, candidato defendido por el PP, ha sido calificado en reiteradas ocasiones como «inaceptable» por el PSOE.
Este magistrado, que durante siete años portavoz del Consejo General del Poder Judicial, dice que para un jurista «no es plato de buen gusto verse en los platós políticos» y añade que
«Estamos ante descalificaciones personales que obedecen a razones históricas. Me tocó ser portavoz del órgano de Gobierno de los jueces en un momento de cambio político (primera legislatura de Zapatero). Me tocó defender la ley frente a posiciones políticas muy respetables. Pero cuando lo que solicitan es no aplicar la ley dejan de serlo».
Hace unos días el Senado rechazaba esta candidatura y alegaba que López no era un candidato idóneo para el TC porque no cumplía con el mínimo de años (15) ejerciendo la judicatura. Aunque López cuenta en su currículum con más de 20 años de carrera, la norma en la que se basa la Cámara Alta excluye los años que fue portavoz del CGPJ.
López defiende su idoneidad sosteniendo que
«Es absurdo el pretexto legal por el que se me han negado mis más de 20 años de experiencia debido a los siete años en los que he estado entregado al Gobierno del Poder Judicial (portavoz del CGPJ).
Decir que en ese tiempo yo no he ejercido labores de jurista, ni labores próximos a la carrera judicial es negar la norma por la más absurda de las interpretaciones».
El PP ya ha anunciado que está dispuesto a llegar al Tribunal Constitucional para que se acepte la candidatura de Enrique López para formar parte de éste mismo órgano judicial. El caso sigue abierto y la renovación del TC en punto muerto desde siembre de 2007.
ESTATUTO DE CATALUÑA
Sobre la sentencia a cerca del nuevo Estatuto de Cataluña, Enrique López matiza que se está colocando a este texto como pieza principal del conflicto.
«No hay que olvidar que aquí lo que prima es la Constitución. Es la norma más importante de nuestro ordenamiento jurídico y todo lo demás pende de ella. El Estatuto es una norma derivada. Lo importante es que la Constitución mantenga su esencia y que se acomoden a ella las demás normas. No al revés.»
