¿Se puede tener un cargo político y, por arte de magia, desaparecer cinco meses? Bueno, en realidad el político, Pedro de Armas, del Partido Nacionalista de Lanzarote, aún sigue ‘missing’, pero perfectamente localizado, aunque no en aguas del Caribe, como aquel publicitario Curro, el de Halcón Viajes, sino por la costa de Florida, aunque no buscando los tesoros de los mares del Sur, sino a bordo de una goleta y, de paso, dejando una pella telefónica importante por todas las llamadas a su móvil institucional que ha recibido en todo este tiempo.
El concejal, que fue elegido para ocupar un puesto en la bancada de la oposición en el Ayuntamiento de Arrecife pisó por última vez el Consistorio de la capital de la isla el pasado 31 diciembre de 2011, fecha en la que se celebró el pleno de aprobación de los presupuestos municipales para 2012.
Una vez tomadas las uvas de rigor y recogidos los regalos de Reyes, De Armas se puso la gorra de capitán y partió en su barco ‘Cabo Andrés’ para participar en una regata, el Gran Prix del Atlántico, que iba desde el puerto de El Rubicón, en Lanzarote, a la isla de Martinica. Desde entonces, en el ayuntamiento conejero no han vuelto a tener constancia de las andanzas de este caballero. La única señal que tienen de que se encuentra en la dimensión terrenal es por la abultada tarifa de móvil, de 1.200 euros, que se deben a las llamadas que él recibe y que, tal y como está regulado cuando sales al extranjero, al titular de la línea le toca pagar el 50% del coste de la llamada. Pese a ser el terminal titular del Ayuntamiento, éste ya ha dicho que no sufragará la factura, a lo sumo los 120 euros que se paga a los ediles al mes en consumo de llamadas.
El Consistorio, a través de lo que ha salido publicado en otros medios, sabe que ahora mismo se encuentra en Florida, pero desconoce cuándo va a regresar a la isla y ofrecer las oportunas explicaciones.
CASO BRITO ARCEO
Pero no es el primer caso que se produce en Canarias de ‘espantadas’ estando en un cargo. Cierto es que la que se produjo en 2005, con el concejal del PP Juan Manuel Brito Arceo, del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, es más pintoresca. Y es que fue el propio Consistorio y el PP quien le dio el visto bueno para que pudiese tomar parte en la segunda edición de Gran Hermano VIP, donde quedó segundo después de tres meses de concurso.
