FESTIVAL DE VENECIA 2025

De George Clooney a Vladimir Putin, pasando por Frankenstein

Un cóctel que supera al SPRITZ

Festival de Venecia 2025
Festival de Venecia 2025. PD

Este miércoles 27 de agosto de 2025 arranca la 82.ª edición de la Mostra de Venecia. En realidad, debería ser la 93.ª, porque el festival de cine más antiguo del mundo nació en 1932, pero las guerras imposibilitaron algunas ediciones. Sin participación española en la competición oficial (aunque sí en otras secciones), la isla del Lido acoge algunos títulos que, presumiblemente, llegarán a los Oscar. En este previo damos las claves de las 10 primeras películas (de un total de 21) que optan al León de Oro.

Texto: Gloria Scola

Lo bueno, si breve, dos veces bueno. Y aun lo malo, si poco, no tan malo.

Ni caso han hecho este año los cineastas al Oráculo Manual y Arte de la Prudencia (1647) de Baltasar Gracián. La mayoría de las películas en competición en la 82.ª edición del Festival de Venecia, que comienza el 27 de agosto y termina el sábado 6 de septiembre, duran más de dos horas, y algunas —Frankenstein, de Guillermo del Toro, dos horas y media; El mago del Kremlin, de Olivier Assayas, dos horas y 36 minutos; Silent Friend, de la húngara Ildikó Enyedi, dos horas y 25 minutos…— las sobrepasan de largo. Fuera de competición hay una que se lleva la palma (el León de Oro no se lo puede llevar, aunque su director ya lo hiciera en 2011 con Fausto). Es el documental Director’s Diary, del ruso Aleksandr Sokurov. 305 minutos de metraje, cinco horas en la butaca, en las que repasa la segunda mitad del siglo XX. “Véanla con paciencia, con un corazón bondadoso y con atención”, pide el realizador en una nota a través del Festival.

Pues bien. Como advertía en su presentación el director de la Mostra de Venecia, Alberto Barbera, esta tendencia de películas larguísimas no solo alerta al espectador —estamos en un festival de cine; aquí se ven muchas películas—, sino a los programadores, que se vuelven locos ajustando horarios. Y no digamos ya al Jurado. El director norteamericano Alexander Payne, su presidente en esta ocasión, debe estar temblando. Seguro.

Dicho esto, antes de desgranar diez de los 21 títulos a concurso —y ni uno de ellos con participación española, quizá porque ya está compensado con el León de Oro 2024 a La habitación de al lado, de Pedro Almodóvar—, también es justo mencionar que la competición tiene buenísima pinta. Y añadir algunas peculiaridades. Sorprende la numerosa presencia de estrellas internacionales en la competición (George Clooney, Emma Stone, Cate Blanchett, Jude Law, Adam Driver); hay tres películas producidas por Netflix (cuya presencia está vetada en la Sección Oficial a concurso de Cannes, donde se exige desde 2018 su estreno previo en las salas de cine francesas), y, por supuesto, ¡Viva Italia!, hasta cinco largometrajes italianos aspiran al León de Oro (contando Jay Kelly, coproducción entre Estados Unidos, el Reino Unido e Italia).

LAS PRIMERAS DIEZ DE LAS 21 PELÍCULAS QUE COMPITEN POR EL LEÓN DE ORO

  • El miércoles 27, La Grazia (Italia, 131 minutos), del napolitano Paolo Sorrentino, inaugura el Festival. Descrita como una cinta romántica ambientada en Turín y en la plaza de España de Roma y rodada al estilo de Truffaut, algunos medios aseguran que narra los últimos días de un ficticio presidente de la República italiana (interpretado por Toni Servillo), que, además de esta historia de amor, debe sopesar dos complejas peticiones de indulto (gracia referida en el título). Sorrentino, ganador del Oscar por La Gran Belleza y del León de Plata-Gran Premio del Jurado de Venecia por Fue la mano de Dios, dirige al actor napolitano por séptima vez, incluida aquella primera en la que participó en Venecia 2001 con Un hombre más.
  • El jueves 28 se presentan tres películas. En Orphan, del húngaro László Nemes (El hijo de Saúl), el director sitúa la historia en el Budapest de 1957, un año después del levantamiento húngaro contra el Régimen Comunista. Un joven judío criado sin padre, a quien idealiza, se enfrenta a un hombre bruto que afirma ser su verdadero progenitor. Dura 132 minutos.
  • Bugonia, producción británica dirigida por el griego Yorgos Lanthimos (Canino, Langosta, La favorita, y ganador del León de Oro con Pobres Criaturas), es un remake de la comedia del absurdo surcoreana Save The Green Planet! (2003), de Jang Joon-Hwan. Emma Stone interpreta a la presidenta de una empresa que es secuestrada por dos pirados. ¿El motivo? Están convencidos de que es una peligrosa extraterrestre que quiere destruir la Tierra. Jesse Plemmons y Alicia Silverstone figuran en el reparto, y, como dato, el término Bugonia hace referencia a la antigua creencia de que las abejas se generan espontáneamente a partir de carne descompuesta de toro. La música es de Jerskin Fendrix, y, por cierto, en el tráiler suena la canción Basket Case (Caso perdido), de la banda californiana de punk Green Day. Muy pegadiza. Dura dos horas.
  • Jay Kelly. Netflix debuta en la Mostra por todo lo alto, y probablemente con la película con mayor número de estrellas. El norteamericano Noah Baumbach (Frances Ha, Historia de un matrimonio, también de Netflix), se pregunta cuándo es demasiado tarde para cambiar el curso de la vida con una historia sobre la identidad que dura dos horas y diez minutos. Un famoso actor cuyo nombre es Jay Kelly (George Clooney) y su representante (Adam Sandler), emprenden un intenso viaje por Europa en el que se cuestionan sus aciertos, errores, relaciones y legados. Innegablemente, George Clooney también es en la vida real un (muy, muy) famoso actor. Como también lo era dentro y fuera de la pantalla Julia Roberts (quien, por cierto, visitará el festival por primera vez en su vida con Caza de Brujas, fuera de concurso), en Notting Hill. Veremos dónde le lleva el experimento, muy atractivo a priori. Completan el reparto Laura Dern, Billy Crudup, Riley Keough (nieta de Elvis Presley); Grace Edwards, Stacy Keach, Jim Broadbent (el “padre” de Bridget Jones); Patrick Wilson, Eve Hewson, Greta Gerwig (mujer del director y directora de la taquillera Barbie); Alba Rohrwacher, Josh Hamilton, Lenny Henry, Emily Mortimer (coautora del guion), Nicôle Lecky, Thaddea Graham e Isla Fisher. La banda sonora la firma Nicholas Britell.
  • El viernes 29, otros dos estrenos mundiales. À Pied d’Oeuvre (A pie de obra), de la francesa (también actriz) Valérie Donzelli, es una adaptación de la autobiografía publicada en 2023 por el fotógrafo parisino Franck Courtès. Courtès, que hoy tiene 64 años, dejó la fotografía en la cima de su carrera para convertirse en escritor, aunque tal decisión le llevara a la ruina económica, y eso es lo que cuenta la cinta. La música es de Jean-Michel Bernard y está protagonizada por Bastien Bouillon (La noche del 12, El conde de Montecristo), André Marcon y Virginie Ledoyen. Es de las cortitas (92 minutos), lo cual se agradece.
  • También el viernes 29, la muy esperada por muchos No Other Choice (No hay otra opción), que firma el surcoreano Park Chan-Wook con un guion coescrito por Don McKellar. Esta sexta película en competición está basada en la novela The Ax (El hacha), de Donald E. Westlake, en la que, a su vez, se basó Costa-Gavras para Arcadia. En 139 minutos narra cómo el empleado de una fábrica de papel con una vida estupenda —puesto, casa, mujer, dos hijos, dos perros…— es despedido repentinamente por su empresa tras 25 años de trabajo. “Lo sentimos; no hay otra opción”, le anuncian. Ante la imposibilidad de encontrar una nueva oferta varios meses después, decide “eliminar” a los candidatos preparados para el mismo puesto. Entre los productores figura KG Productions (Michèle Ray Gavras y Alexandre Gavras, mujer e hijo de Costa-Gavras, respectivamente). Park Chan-Wook (Thirst, La Doncella, Oldboy), cuyo cine violento y cargado de humor negro se ha ganado admiradores en todo el mundo, asegura ser fan de A Quemarropa (basada en otra novela del mismo autor), “una de mis películas preferidas”, y que precisamente por eso descubrió The Ax, con cuyo protagonista se siente identificado. Lleva 20 años queriendo hacer la película, y, al final, ha ido directamente a la competición de Venecia.
  • Llegamos al sábado 30 con otros dos títulos. Sotto le Nuvole (Bajo las nubes) es el segundo largometraje italiano en competición, esta vez, en forma de documental, que firma el galardonado director Gianfranco Rosi. Dura 115 minutos y es Nápoles en blanco y negro. Un viaje al alma y al aire manchado del Golfo de Nápoles, del Vesubio, de las fumarolas de los Campos Flégreos —la caldera volcánica—, de las ruinas enterradas de Pompeya y Herculano. La historia, la arqueología y la vida cotidiana. Rosi obtuvo el León de Oro en 2013 por Sacro GRA (sobre la gran vía de circunvalación de Roma, donde vivió en un remolque durante casi tres años), y el Oso de Oro en la Berlinale 2016 por Fuocoammare (Fuego en el mar), acerca de los inmigrantes llegados a Lampedusa, en la costa siciliana, donde también estuvo otros tres años. Nacido en Etiopía hace 60 años, el director vivió en Roma hasta los 11, posteriormente en Turquía, y luego estudió cine en Nueva York. Tiene doble nacionalidad —italiana y estadounidense—, y dice que esta vez también se ha pasado otros tres años viviendo y filmando en los horizontes del Vesubio.
  • El mexicano Guillermo del Toro (El laberinto del fauno, La forma del agua), sin embargo, nos traslada a otro clásico, pero en un sentido diferente. Frankenstein, producción americana de 149 minutos, una de las nuevas criaturas de Netflix, revisita la novela de Mary Shelley y convierte a Oscar Isaac en el doctor, y al actor australiano Jacob Elordi (Priscilla), en su creación. Completa el reparto Christoph Waltz y la música es del excelente Alexandre Desplat. Para del Toro, solo los monstruos tienen las respuestas a todos los misterios.
  • La semana la cierran otros dos reconocidos cineastas: uno francés, y el otro, norteamericano. Olivier Assayas (director de la magnífica Carlos, sobre el Chacal), lleva a primera plana a Vladimir Putin, como si no estuviera ya de suficiente actualidad el actual presidente ruso. En Le Mage du Kremlin (El mago del Kremlin), un ficticio cineasta convertido en asesor de imagen, Vadim Baranov (Paul Dano, Pozos de ambición), ayuda en la Rusia post-soviética de los años 90 al entonces agente de la KGB Putin (encarnado por el británico Jude Law), en su ascenso al poder. Con él modela el nuevo país con borrosos límites entre la verdad y las mentiras (eso, también es muy actual). Y solo una mujer (la actriz sueca Alicia Vikander) queda fuera del control de Baranov. Esta producción francesa de 156 minutos está basada en la novela de Giuliano da Empoli y su guion ha sido coescrito por Emmanuelle Carrère, premio Princesa de Asturias de las Letras 2021. ¿Y por qué una película sobre Putin? Según la nota de Assayas proporcionada por el Festival, “esta no es una película sobre el auge de un hombre, sino una reflexión acerca de la política moderna, o más bien, de las cortinas de humo en las que se esconden el cinismo, el engaño y la toxicidad. Hoy los líderes utilizan herramientas de manipulación de masas y de distorsión con una precisión que antes era inimaginable. En ese sentido, no es una película política sino una película sobre la política y la perversidad de sus métodos que ahora nos tiene a todos como rehenes. Creo que todavía vale la pena desvelar el funcionamiento interno de las mentiras y de la opresión. Por eso adapté esta novela”. Desde luego, suena muy interesante.
  • Y la primera semana de la Mostra concluye con cine independiente. El norteamericano Jim Jarmusch (Bajo el peso de la ley, Dead Man, Paterson), ofrece el tríptico Father, Mother, Sister, Brother (Padre, madre, hermana, hermano), coproducción entre Estados Unidos, Irlanda y Francia de 110 minutos con guion propio, rodada en inglés y en francés que estrenará en España AVALON. Cuenta en su reparto con el músico Tom Waits, además de numerosas estrellas: Adam Driver (con el que ya hizo Paterson); Charlotte Rampling, Cate Blanchett, Vicky Krieps, Sarah Greene, Indya Moore, Luka Sabba, Mayim Bialik y Françoise Lebrun. El diseño de vestuario es de Catherine George y de Anthony Vaccarello (YSL), y la música, de Jarmush y Anika. ¿Qué de qué trata? Son tres historias ambientadas en la época actual en las que se exploran las relaciones familiares. Padre se desarrolla en el noreste de Estados Unidos; Madre, en Dublín, y Hermana, Hermano en París. Una comedia con aire melancólico, y, sobre todo, un estudio de personajes discreto que no juzga; solo los observa. Muy importante: Entre los productores, Saint Laurent Productions (Anthony Vaccarello). Por lo menos, el buen gusto en el vestuario está garantizado.

En otra entrega, más.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Gloria Scola

Periodista de cine

Lo más leído