No está claro si Cristina volverá –la pidió hace un año- con una pretendida como improbable mediación papal por Malvinas
(Sergio Rubin).- Un año después del primer encuentro entre el entonces flamante Papa Francisco y la presidenta Cristina Kirchner, el jefe de la Iglesia Católica y la mandataria argentina volverán a reunirse hoy, pero en un contexto y con expectativas bien diferentes. En aquel momento, Cristina esperaba recomponer una relación con Jorge Bergoglio que venía de ser fría y distante -por momentos agresiva- y subirse a la naciente «franciscomanía» en un año electoral. A su vez, el pontífice quería mostrarse magnánimo -le abrió de par en par las puertas del Vaticano- e interesado en la suerte de sus compatriotas -que era un poco la suerte de su Gobierno- cuando ya despuntaban crecientes problemas económicos y sociales.
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