Futuro. El Barcelona no pierde de vista el mañana. El club azulgrana mira con preocupación la caída de uno de los grandes puntales del equipo: Javier Mascherano. La fuerza del argentino se apaga. El pasado verano lo avisos que llegaban desde la secretaría técnico de la entidad/despachos era uno: es el momento de colocar a Javier. La oferta de la Juventus tenía a la plana mayor del Barcelona haciendo palmas. No a Luis Enrique/Messi que se movilizaron para frenar una marcha cantada. Error.
El arranque del curso está dando la razón a la ejecutiva que vuelve a la carga. Mascherano no justifica una ficha que se va de madre. La prometida mejora sigue sin firmarse a pesar de estar acordada y muchos son en el Barça los que desean que la firma no se produzca. Es más: el club azulgrana maneja ya una lista de fichajes para reforzar la posición de central el próximo curso.