PRIMERAS LETRAS
(La escuela de párvulos de Tórtola de Henares)
Bajaba la mañana aún con frío
de la mano de mi madre a la escuela,
con ajustado gorro que revela
la frialdad del invierno entre el rocío.
De Tórtola cruzando el caserío,
cubierto y recubierto por la tela
y mano de madre que más consuela
llegaba de la escuela el vocerío.
Cruzando el leve arroyo de la Vega,
la breve escuela se abría entre pinos
y una canción de abecedario llega…
Recuerdo. Alzo la vista. Allí los sinos
iniciaron la aventura andariega
que abriesen de los libros los caminos,
y que en la ventana izquierda que a la tarde relucía,
yo leyera y escribiera la primera poesía
a la mano matinal que por la mañana me asía.
