LLANTO POR ANTONIO GALA,
EL DÍA DE SU MUERTE, AL QUE LLEGÓ VIVO.
Llanto por Antonio Gala,
el andaluz castellano,
pues a Córdoba es lejano
el Valle de Alcudia. Exhala
y en castellano engalana
su acento de dos lugares
dos provincias de olivares
allí donde último plano
de Ciudad Real se baja
y Córdoba se atalaja
Enemigo íntimo suyo
y de Premios literarios,
pues dicen los comisarios
que ya le ha premiado el público.
¡Otro más de los más grandes
Premios de valor no gana!,
¡y es que la injusticia mana
cuantos más políticos mandes
a componer el jurado
del fallar…. mal comenzado.
La gala que luce Gala
es elegancia al hablar,
es lirismo en el versar,
es teatro de alta sala,
es prosa que TV avala.
Y es periodismo menor,
que llevó aun a este autor
a criticarle algo acerbo,
porque el poder de su verbo
sectario fue en opinión.
No creía en otra vida,
pero vivió la que tuvo,
hasta los 92 subo
como sabia recibida
años al fin de su vida
galanamente enviudó
del amor que tuvo a vida.
JPM
