La Corte Penal Internacional (CPI) emitió órdenes de arresto contra el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, el exministro de Defensa Yoav Gallant y el líder militar de Hamás, Mohammed Deif por presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
La decisión se tomó tras rechazar las impugnaciones de Israel a la jurisdicción del tribunal.
Los jueces encontraron «motivos razonables» para creer que los acusados son responsables de crímenes cometidos durante la guerra entre Israel y Hamás.
Las acusaciones contra Netanyahu y Gallant incluyen ataques deliberados contra civiles, uso del hambre como arma de guerra, exterminio y asesinato.
Deif es acusado de asesinato, exterminio, tortura, violación y toma de rehenes, entre otros crímenes.
La ejecución de las órdenes dependerá de los 124 estados miembros de la CPI, que no incluyen a Israel ni a Estados Unidos. El fiscal Karim Khan había solicitado estas órdenes en mayo, junto con las de otros líderes de Hamás ya fallecidos.
Israel rechazó las acusaciones, calificándolas de «falsas y absurdas».
El presidente israelí, Isaac Herzog, llamó «escandalosa» la decisión.
Por su parte, Hamás acogió con satisfacción las órdenes contra los líderes israelíes y pidió a la comunidad internacional que las haga cumplir.
La guerra en Gaza ha causado la muerte de más de 44.000 personas, según el Ministerio de Salud palestino.
El conflicto se desencadenó tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, que dejó 1.200 muertos y 251 rehenes en Israel.