Conocido como 'CryptoSpain' está acusado de estafa

Romillo, el denunciante de Alvise, rompe su silencio: «La trama es más grande de lo que la gente piensa»

Gestos de 'Madeira Invest Club' –el chiringuito financiero que pagó 100.000 euros 'sin factura' al impulso de 'Se Acabó la Fiesta'

Alvaro Romillo 'Criptospain' y Alvise Pérez
Alvaro Romillo 'Criptospain' y Alvise Pérez. PD

Como se decía con sorna en otro tiempos: ‘esto no se queda así: esto se hincha‘.

Álvaro Romillo alias ‘CryptoSpain’, el tipo detrás del Madeira Invest Club, parece dispuesto a largar y lo hace tras contarle a la Policía que entregó -sin factura- 1000.000 a Alvise Pérez.

El impulsor de ‘Se acabó la fiesta’, que ahora es eurodiputado y logró un éxito notable en las pasadas elecciones europeas cosechando más de 800.000 votos, ha reconocido que cobró ese dinero y que no declaró ni el IVA.

El propio Alvise subió el pasado  jueves, 26 de septiembre de 2024, un vídeo a redes sociales, donde en lo que pretendía ser una ‘declaración institucional‘ admitió haber recibido esos 100.000 euros.

En privado, Alvise asegura que esa cantidad fue un pago que se le hizo por intervenir en un acto de Madeira Invest Club, dirigiendo la palabra a los asistentes.

Añade que no tiene nada que ver con ese ‘chiringuito‘, tilda de ‘estafador‘ a Romillo y reitera que no ha tenido contactos con el.

Para colmo y como telón de fondo, tenemos que hay decenas de personas que denuncian haber sido estafadas tras invertir en su sociedad.

Y que ‘CryptoSpain’ se ha esfumado y parece estar en Dubai.

Romillo no ha aclarado todavía cuál era su vínculo con Alvise, pero advierte amenazado que el entramado es «más grande de lo que la gente se piensa».

En un vídeo que ha difundido a través de canales privados de mensajería, no revela apenas nada Madeira Invest Club.

Sí se pronuncia sobre el cese de la actividad del club y el cierre de sus cuentas bancarias, que atribuye a presiones externas y considera un riesgo para toda la estructura financiera de su negocio.

Sin mencionar a Alvise o responder a sus palabras, Romillo subraya que no responderá a “bulos y mentiras” difundidos sobre sus actividades debido a que se encuentra bajo investigación judicial.

Afirma que su primera declaración será ante un juez.

Romillo finaliza su mensaje pidiendo calma a los afectados y justificando su silencio mediático debido al proceso judicial en curso.

Aunque asegura que le gustaría “vapulear” a quienes han hablado mal de él en los medios, insiste en que “no es el momento” de hacerlo.

De Álvaro Romillo se sabe que desde 2021 se dedica a la asesoría financiera a particulares y empresas para «ventajas económicas a través de la elusión fiscal».

Cómo se puede consultar en su perfil de LinkedIn, es CEO de dos empresas: Pixeline S.L., una agencia de comunicación, y RomilloPens, una empresa de estilográficas de lujo, con las que comenzó a crear una marca personal, si bien ninguna de ellas aparece como activa en la red social.

Hace algunos años creó Madeira Invest Club para gestionar su cartera de clientes de sus servicios de asesoría: esta compañía basaba su actividad en publicar obras de arte y bienes de lujo digitales (NFT) que los miembros podían comprar a través de efectivo, transferencia bancaria o criptomonedas.

Precisamente en ese último método de pago se centraba su actividad como Luis de CryptoSpain, una web con lemas como «La mayor comunidad de fiscalidad en España» o «Trabajas todos los días para pagar unos impuestos que el Estado te está robando».

En 2023, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) definió a todo este entramado empresarial como un «chiringuito financiero» y alertó que la entidad no estaba autorizada a realizar actividades de inversión.

El pasado 19 de septiembre, y tras publicar El Confidencial una información sobre un presunto desvío de fondos de donaciones de campaña, hecho por Alvise a dos cuentas opacas, Romillo acudió a denunciar los hechos para seguidamente clausurar toda la actividad de Madeira Invest Club.

Según los afectados, la estafa puede rondar los 60 millones de euros.

Los perjudicados –agrupados en su mayor parte bajo el despacho Zaballos Abogados— explican el modus operandi de MIC, que tiene todos los elementos de lo que se conoce como ‘estafa piramiudal’.

Para ingresar, era preciso abonar una tasa de membresía de 2.000 euros.

Una vez se entraba en el Club, se accedía a la posibilidad de adquirir todo tipo de ‘obras’ que se compraban y se vendían en distintas operaciones.

Las posibilidades eran inmensas, desde viviendas antiguas para reformar, vehículos de lujo, alquiler y servicios de charter de embarcaciones, colecciones de arte, colecciones de botellas de Whisky, colecciones de relojes…

A cambio, importantes intereses a medio y largo plazo.

En los contratos suscritos los intereses eran más elevados cuanto más lejano en el tiempo fuera el momento del recobro. La mayoría, superaba las rentabilidades del 20% anual, planteándose el objetivo de alcanzar una rentabilidad mínima del 30%.

«Desde el club se les incitaba además a reinvertir los beneficios en nuevas obras, con el objeto de que el dinero depositado jamás saliera ya de sus cuentas, lo que ha provocado que la mayoría de ellos jamás haya percibido beneficio alguno».

La empresa cerró en agosto de 2024

Según Alvise, conoció a Romillo en abril de este año, en un acto en el Hipódromo de la Zarzuela para publicitar Madeira Invest Club.

Y fue ahí donde Romillo le ofreció 100.000 euros por ‘dirigir la palabra a los asistentes’

100.000 euros que cobró en las oficinas de Sentinel algo después.

Tratando sin duda de ‘salvar el culo’, Romillo ha trasladado a la Audiencia Nacional (AN) su deseo de poner su patrimonio a disposición de sus antiguos clientes de Madeira Invest Club (MIC), para que puedan ver «resarcido» el dinero que les habría estafado.

Advierte su defensa, que encabeza el letrado Francisco Miranda, sobre la necesidad de que se nombre un administrador judicial para que gestione sus activos porque «si no se administra en la forma adecuada pueden perder todo su valor en semanas».

El empresario, además de pedir que se proceda al embargo de la cuenta de una entidad bancaria portuguesa en la que depositaba las ganancias de MIC, pone a disposición de los que han impulsado la macrodenuncia contra él una docena de mercantiles vinculadas a negocios de toda clase que montó con el dinero que logró con los eventos que montaba y las obras digitales que publicitaba.

VOX ha decidido querellarse contra Alvise, tras insinuar el líder de ‘Se acabó la fiesta’ que Santiago Abascal también recibió pagos en efectivo de ‘CryptoSpain’.

 

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