Viven de los eslóganes ‘fast food’, de la propaganda facilona y de mucha manifestación.
Pero a la hora de la realidad, los ‘genios’ (y ‘genias’) que pululan por el Ministerio de Igualdad solo están ojo avizor a trincar un buen pellizco de los Presupuestos Generales del Estado.
La cuestión de las violaciones y agresiones sexuales que, en teoría tanto les preocupa, acaba no solo por no resolverse, sino que los datos son cada vez peor.
Desde que Irene Montero ha ejercido esa cartera, en enero de 2020, lo que más ha movido a su equipo es el de asegurarse una buena dotación presupuestaria por parte de Pedro Sánchez.
Y es que tal y como detalla este 22 de octubre de 2021 el diario El Debate, en una información elaborada por Raquel Tejero y José Ramón Pérez, en cinco años la partida destinada a Igualdad se ha multiplicado en los últimos cinco años por 10.
Sin embargo, mayor dotación económica no ha ido aparejada, precisamente, a conseguir una concienciación social y el número de violaciones ha experimentado un incremento del 66%.
Los PGE de 2021 y los previstos para 2022 han colocado a Igualdad como una de las carteras que más incremento monerario, en términos porcentuales, experimenta.
Los ejercicios de 2016 y 2017, con Mariano Rajoy en el Gobierno, la partida para este departamento se movió entre los 45 y los 51 millones de euros.
En 2018, con los PGE aprobados días antes de que se presentara la moción de censura contra el presidente popular, Igualdad dio un salto a los 181 millones, cantidad que, debido a que se prorrogaron los Presupuestos durante dos años, se mantuvo inalterable en 2019 y 2020.
Sin embargo, en 2021 la cifra que maneja el chiringuito de Irene Montero se ha ido a 459 millones y para 2022, a falta del visto bueno a los PGE, el montante se dispara hasta los 525 millones.
A MÁS DINERO, MENOS SEGURIDAD PARA LAS MUJERES
Sin embargo, cuanto más dotación pecuniaria tiene el Ministerio de Igualdad, resulta que el panorama para las féminas es más desolador.
Tanto es así que el número de violaciones y agresiones sexuales se ha visto incrementado en un 66% entre 2016 y 2021 considerando solo los datos del primer semestre, ya que aún 2021 está en curso y la comparativa quedaría desdibujada al comparar ejercicios completos con uno al que le faltan aún los meses de noviembre y diciembre.
En 2016 se produjero 4.670 agresiones sexuales, a las que hay que sumar 575 violaciones con penetración.
En 2017 la cifra se eleva a 5.081 delitos sexuales más 615 violaciones con penetración.
En 2018 la cantidad ya es de 5.691, a las que se añaden 799 violaciones.
En 2019 el montante de delitos sexuales sin penetración suben a 6.422 más 825 violaciones.
En 2020, con la pandemia por el coronavirus y el confinamiento de prácticamente cuatro meses la cantidad de agresiones baja a 5.227 y también las violaciones, 731.
En 2021, durante ese primer semestre, los datos vuelven a ser alarmantes. 6.943 delitos sexuales y cerca de 1.000 violaciones con penetración, exactamente 955.
