El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que va a trabajar desde su posición para buscar un punto de encuentro con todas las formaciones políticas y no solo con Podemos donde se hable de «políticas de fondo», poniendo sobre la mesa «el empleo y ese más del 30 por ciento de la población que está en la cuneta».
A preguntas de los medios tras presentar los nuevos autobuses urbanos de Toledo el 1 de junio de 2015, García-Page ha dicho que su intención es «convocar no solo a Podemos, sino a todos los partidos, a un esfuerzo conjunto», ya que «lo que queda por delante es mucho esfuerzo y mucho trabajo».
Ha asegurado en este punto que no quiere «polemizar» con Podemos «ni establecer un diálogo a través de los medios de comunicación», ya que según ha resaltado ambas formaciones han llegado al compromiso de «tener conversaciones serenas y discretas».
Preguntado por las condiciones que Podemos puede establecer para otorgarle su apoyo de cara a su posible investidura como presidente regional, García-Page ha dicho que «hay que ser flexible para incorporar sensibilidades», pero que en todo caso no se va a «apartar» de su forma de ser.
Quiero ser presidente para todos, desde una perspectiva de centralidad política. Los partidos tienen que tener su ideología, pero la aplicación de esos valores desde un Gobierno tiene que ser a favor de todo el mundo y nunca contra nadie.
García-Page se ha mostrado «respetuoso» ante la propuesta de Podemos de poner en marcha una consulta ciudadana entre sus militantes para hablar de la postura en cuanto a pactos con el PSOE, aunque ha avisado de que en España «están cambiando mucho las cosas y lo esencial del país no debería estar en discusión».
Ha enfatizado además en que Podemos «está evolucionando en su posición política» en el último año, algo que es «razonable y lógica». «Al final lo bueno es que todos trabajemos en las cosas que nos unen y no en las que nos separan».
Page apostará por un Gobierno «entre el cambio y lo conocido» y no exigirá a sus consejeros ser militantes del PSOE
Por otra parte, García-Page ha asegurado que si preside la Comunidad Autónoma buscará en su Consejo de Gobierno «un equilibrio entre el cambio y lo conocido».
Ha dicho que en todo caso está pensando en «los mejores, los más preparados para sacar a la región de un hoyo muy duro, gente honesta, decente y sin límite para el trabajo», además de que no va a exigir la condición de militante del partido ni tampoco excluirá a nadie por esa condición.
«Llevo muchos años en política oxigenando y cambiando, habrá mucho cambio pero no ruptura, un cambio progresivo», ha explicado.
