La noticia ha estremeció a Córdoba, a España entera y al mundo.
El techo de una de las capillas de la icónica Mezquita-Catedral, joya declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1984, ha colapsado este sábado 9 de agosto de 2025, tras el incendio de la noche del viernes.
Según las primeras investigaciones, una barredora mecánica ubicada en la capilla de Almanzor habría desencadenado el fuego, un incidente que ha puesto en alerta a los guardianes de este tesoro histórico, donde la majestuosidad del pasado convive ahora con el eco de la fragilidad.
La noche del viernes, Córdoba vivió momentos de tensión cuando un incendio se declaró en una de las capillas situadas en las naves de Almanzor dentro de la Mezquita-Catedral, uno de los monumentos más emblemáticos del patrimonio español.
El fuego, que arrancó poco después de las nueve de la noche, fue controlado en menos de dos horas gracias a una respuesta ejemplar de los servicios de emergencia y la activación inmediata del plan de autoprotección del monumento.
«Habrá daños, pero no será una catástrofe«, resumía el alcalde José María Bellido, transmitiendo tranquilidad tras una jornada marcada por la incertidumbre y el miedo a perder parte de la memoria arquitectónica andaluza.
Las imágenes del humo elevándose sobre el bosque de columnas han dado la vuelta al país, pero hoy se respira alivio en la ciudad califal.
Todo apunta a que el incendio se originó por un cortocircuito en la batería de una barredora mecánica almacenada en una capilla utilizada como almacén, justo en el sector ampliado por Almanzor a finales del siglo X.
El foco del fuego se localizó rápidamente, lo que permitió a los bomberos actuar con eficacia y evitar males mayores.
Uno de los efectivos fue evacuado por un golpe de calor, recordando el enorme esfuerzo físico realizado bajo temperaturas que rozaban los 39 grados esa noche.
Las llamas ascendieron velozmente debido a la presencia de madera en esa zona concreta, pero se logró evitar que afectaran al conjunto principal del edificio. El operativo contó con tres dotaciones principales y una grúa, cortando todos los accesos al recinto para priorizar las labores de extinción.
Catedral de Cordoba*, catedral-mezquita si se siente usted generoso. https://t.co/jXzEzSh8vt
— ✞ Res publica ✞ (@republicocat) August 9, 2025
Un icono cultural: historia y singularidades
La Mezquita-Catedral de Córdoba es un símbolo universal, declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1984. Su historia es tan fascinante como compleja: comenzó como mezquita musulmana en el siglo VIII y fue consagrada como catedral cristiana tras la conquista castellana en 1236. Desde entonces, su arquitectura ha sido testigo del cruce y convivencia entre culturas.
Destaca por su famoso «bosque» interior, formado por 856 columnas (llegó a tener más de mil), realizadas en mármol, jaspe y granito, unidas por arcos dobles inspirados en los acueductos romanos. Esta imagen icónica impresiona tanto hoy como hace siglos; incluso reyes cristianos defendieron su conservación tras la conquista.
La ampliación realizada por Almanzor entre 987 y 988 añadió ocho naves hacia el este —y no hacia el sur para no acercarse demasiado al río Guadalquivir—, convirtiéndola entonces en la mezquita más grande fuera del mundo abasí. Esta intervención también implicó la fabricación acelerada (y menos ornamentada) de capiteles y columnas para cubrir la enorme demanda estructural.
Daños controlados: evaluación y restauración
A pesar del susto inicial, los daños parecen limitados y localizados principalmente a la capilla donde se originó el incendio y parte del entorno inmediato. La estructura principal no ha sufrido daños estructurales graves según las primeras valoraciones oficiales. Los técnicos ya trabajan para evaluar con precisión el impacto sobre bienes muebles e inmuebles afectados por el humo o las llamas.
La experiencia acumulada por los simulacros periódicos realizados en el monumento ha sido clave para que bomberos y personal del Cabildo actuaran con rapidez y coordinación. Todo apunta a que las tareas de restauración serán complejas pero asumibles sin alterar gravemente el día a día del templo ni su atractivo turístico.
Curiosidades y datos locos sobre la Mezquita-Catedral
No todo es tragedia ni preocupación cuando hablamos del templo cordobés; su historia está plagada de anécdotas sorprendentes:
- Cuando los cristianos conquistaron Córdoba, defendieron a ultranza que no se demoliera la mezquita, algo muy inusual para la época.
- En su interior hay columnas reutilizadas procedentes de templos romanos e incluso visigodos.
- El número exacto actual es 856 columnas, aunque llegó a tener 1003 antes de diversas intervenciones históricas.
- La ampliación realizada por Almanzor dejó descentrado el mihrab (el nicho orientado hacia La Meca), un detalle arquitectónico único.
- Se dice que Almanzor robó las campanas de la catedral compostelana para fundirlas como lámparas… aunque finalmente volvieron a Santiago tras otra conquista cristiana.
- En 2024 batió récord histórico con más de dos millones cien mil visitantes anuales.
- La temperatura interior suele ser sorprendentemente fresca incluso durante olas extremas como la vivida esta semana.
- Sus naves están alineadas con precisión milimétrica pese a haber sido ampliadas sucesivamente durante siglos.
El futuro inmediato: vigilancia reforzada y llamada al respeto patrimonial
Tras este episodio, las autoridades han anunciado que se revisarán todos los protocolos eléctricos e instalaciones para evitar nuevas incidencias. La ciudadanía cordobesa y visitantes internacionales han mostrado su alivio pero también una renovada conciencia sobre lo frágil que puede ser nuestro patrimonio común.
Resulta inevitable pensar que cada piedra, cada columna salvada anoche gracias al trabajo incansable “de Dios y los bomberos”, como exclamaba el obispo emérito Demetrio Fernández, guarda siglos de historia viva. Y que incluso tras un susto monumental —literalmente—, la Mezquita-Catedral sigue siendo mucho más que un edificio: es memoria compartida e inspiración constante.
