(PD).- El mago del balón, el espectáculo del fútbol, la elegancia personificada, un jugador de dibujos animados. Un hombre al que todos recuerdan con nostalgia. Cambió las leyes de este deporte. Michael Laudrup ha sido elegido por la Federación Danesa de Fútbol (DBU) mejor jugador danés de la historia.
«Es algo único ser elegido por toda una carrera y no sólo por una temporada», afirmó Laudrup en la gala celebrada anoche en Copenhague. El ex jugador del Real Madrid y del Barcelona dijo sentirse sorprendido por la elección y declaró que hubiera sido más acertado escoger al también ex barcelonista Allan Simonsen, que junto con el portero Peter Schmeichel y el delantero Elkjaer Larssen eran los otros candidatos al premio. Pero, quizá, este caballero tanto dentro como fuera del césped, humilde en todo su ser, era el más indicado para ostentar este premio.
Pero recordemos un poco su historia, por si a alguien le interesa. Laudrup nació en Fredriksen, un pequeño pueblo cercano a Copenhague, la capital de Dinamarca, el 15 de junio de 1964. Centrocampista de clara vocación ofensiva, estaba dotado de una extraordinaria técnica individual y talento, que le permitía «inventar» en cada partido nuevas acciones, las denominadas jugadas «Made in Laudrup», entre las que destacan el regate «croqueta» y sus pases al hueco sin mirar. Fue uno de los grandes asistentes del fútbol europeo, dada la gran cantidad de pases de gol que ofreció a sus compañeros.
Despuntó desde muy joven. En 1989 fichó por el FC Barcelona, por expreso deseo del entonces entrenador barcelonista Johan Cruyff. En el Barcelona vivió los mejores momentos de su carrera deportiva, que se relanzó hasta situarlo en la cúspide del fútbol mundial. A ello contribuyeron los éxitos del Barcelona, con el que conquistó la Copa de Europa en 1992 y cuatro Ligas consecutivas. Laudrup era uno de los pilares indiscutibles del equipo, y uno de los tres jugadores extranjeros de aquel Barcelona al que denominaron «Dream Team». Los otros dos eran Ronald Koeman y Hristo Stoichkov.
Abandonada la disciplina azulgrana, pasó al otro bando. Jugó en el Real Madrid dos temporadas, entre 1994 y 1996, y ganó una Liga, la del año 1995. Esa primera temporada, además, se tomó la venganza personal con Cruyff al contribuir a la goleada por 5-0 le infligió al Barcelona. Curiosamente, la temporada anterior, Laudrup había contribuido a que el Barcelona también derrotase por 5-0 al Real Madrid. Abandonó el Real Madrid a la finalización de su contrato por dos temporadas, en 1996, y decidió aceptar una buena oferta económica del Vissel Kobe, un equipo de la Liga Japonesa. Acabó su brillante carrera como futbolista jugando una temporada en el Ajax Amsterdam.
