(PD/EP).- Martinsa-Fadesa ha alcanzado un acuerdo definitivo con sus bancos acreedores sobre los términos y condiciones para refinanciar la deuda de 5.100 millones de euros que soporta, informó hoy la inmobiliaria.
El grupo que controla y preside Fernando Martín ya logró el pasado 25 de marzo un «preacuerdo base» con todas sus entidades acreedoras, tras lograr la adhesión de los fondos internacionales al principio de acuerdo que ya tenía con los bancos radicados en España.
El acuerdo final, que negociaba desde el pasado mes de enero, queda ahora sólo pendiente de ser plasmado en los correspondientes documentos y de su firma. No obstante, permite a la empresa esquivar el pago de 362 millones de euros de deuda que vencía a finales de marzo.
Además, el nuevo esquema de financiación evita a Martinsa-Fadesa el pago de los otros dos vencimientos previstos para este años en el actual préstamo, uno de unos 150 millones de euros en julio y un segundo por importe de 2.000 millones en septiembre.
En virtud del nuevo contrato, Martinsa-Fadesa contará con un plazo de hasta cinco años para amortizar su deuda, se garantiza un tipo de interés no superior al Euríbor + 3,5, y no tendrá que pagar principal en los tres próximos años, según detallaron a Europa Press en fuentes del sector.
La actual deuda de 5.100 millones de euros de Martinsa-Fadesa es equivalente a alrededor del 40% del valor total de sus activos y en su mayor parte corresponde al crédito que Martinsa solicitó para comprar Fadesa.
Compromiso de la banca con el sector
Martinsa-Fadesa calificó de «extraordinariamente positivo» el acuerdo y valoró la «actitud» de las entidades implicadas en el proceso que, en su opinión, «han demostrado su apoyo y su confianza en el proyecto» de la compañía.
Además, estima que acuerdos como éste constituyen «una prueba del compromiso del sector financiero con un sector clave de la economía».
El grupo que preside Fernando Martín considera que tras cerrar la refinanciación se abre una etapa en la que la compañía «podrá desarrollar su ambicioso plan de negocio, que garantizará su crecimiento en los mercados nacionales e internacionales, con los recursos necesarios para afrontar con éxito la actual situación del mercado inmobiliario».
Martinsa-Fadesa recordó que su plan de negocio pasa por la internacionalización, la orientación al cliente y la gestión diferenciada de la actividad de suelo, promoción patrimonio y servicios, con el objetivo último de consolidar la marca «como referencia inmobiliaria en los mercados en los que está presente».
