Poco a poco, cuando nos vamos haciendo mayores, los terribles estereotipos comienzan a inundar nuestra vida. Unas etiquetas que nos impiden en muchas ocasiones disfrutar de nuestro aspecto físico y que afectan directamente a nuestra autoestima. Es en la adolescencia, el momento clave en el que los complejos salen a la luz debido a las presiones sociales, las inseguridades y la vergüenza.
El 36% de las mujeres ha admitido que empezó a sentir vergüenza sobre algún aspecto de su físico entre los 11 y los 20 años. Una cifra extraída de un estudio realizado por la marca Dove, la cual ha querido lanzar el llamado Proyecto Dove para la Autoestima, el cual está orientado para los jóvenes de entre 11 a 13 años.
La marca y como parte de este programa, no duda en impartir talleres de confianza corporal y autoestima en centros educativos, en los que se invita a los estudiantes a reflexionar sobre los odiados estereotipos y la relación con su aspecto físico. Y es que las etiquetas son el principal motivo de que muchos adolescentes tengan baja autoestima y comiencen con ciertos problemas más graves como la conocida anorexia.
Psicólogos y expertos en autoestima corporal son los encargados de impartirlos en los colegios después de haber recibido una formación específica para ello. «Es una experiencia muy gratificante ya que te das cuenta de que a los chicos les interesa mucho este tema y les ayuda a reflexionar y a no juzgarse ni comparase» comentan Eva Cilleros y Juan Antonio Cañada dos de los participantes en estos talleres.
Gordo, flaco, pelirrojo, rubia, moreno, extranjero, gafotas y un largo etcétera de adjetivos son los que comúnmente se escuchan siempre en las aulas y que poco a poco calan en la personalidad de los adolescentes. Acabar con todo ello es una de las mejores maneras para que la autoestima de nuestros jóvenes sea buena y prevenir ciertos riesgos que no queremos vivir en nuestras carnes.
Dove invita a la sociedad a crear un mundo donde la belleza sea una fuente de confianza y no de preocupación. El aceptarnos y vernos tal y como somos es lo mejor para nosotros y sobre todo para sentirnos al cien por cien bien con nuestro cuerpo.
«Creemos que es importante llegar a los jóvenes de hoy, ayudándoles a reflexionar sobre el aspecto físico y los estereotipos para que construyan una relación positiva con su cuerpo» dice María Lemonidou portavoz de la marca y responsable de los talleres en España. «Por eso, de cara a el año que vienen, queremos seguir ampliando estos talleres para que lleguen a cuantos más adolescentes mejor», añadía.
Una iniciativa que poco a poco van llegando a nuestras aulas y que espera que aumenten mucho más durante los años venideros.
