Repartía estopa como si no hubiera mañana. Y con precisión, a pesar de ir bastante bebido.
Un boxeador ha sido detenido la madrugada de este 14 de agosto de 2020, en Barcelona, tras haber golpeado a dos Mossos d’Esquadra y a los camareros que se negaron a servirle cuatro chupitos y le recriminaron tratar de irse de un restaurante del distrito de Ciutat Vella sin haber pagado sus consumiciones.
El detenido, un italiano boxeador «amateur», se encontraba en la ciudad condal de turismo, según informan los Mossos d’Esquadra en un comunicado en el que explican que, sobre las 1.30 horas de este viernes, unos agentes vestidos de paisano recibieron una alerta de una pelea en el interior de un restaurante.
Según la información a la que ha tenido acceso ‘El Periódico’, el agresor le propinó varios puñetazos al camarero que se había negado a servirle cuatro chupitos por no haber pagado la cuenta todavía, y a su compañero que trató de evitar su marcha.
Al llegar al lugar de los hechos, se encontraron con un hombre «con la cara llena de sangre», que procedió a explicar a los agentes lo sucedido y facilitarles una descripción del agresor, que iba acompañado con otra persona.
Así, los agentes iniciaron el proceso de búsqueda del agresor, hallando finalmente a una pareja de hombres «que mantenían una actitud sospechosa y de vigilancia», y uno de los cuales encajaba con la descripción que les habían facilitado y que se podía demostrar con las imágenes que grabaron las cámaras de seguridad.
Cuando los agentes se bajaron del vehículo, los dos jóvenes salieron corriendo, y el agresor «iba haciendo señales con los puños y se mostraba con una actitud muy desafiante», declaran en la nota de prensa, que explica que los agentes fueron agredidos «violentamente con diversos puñetazos», y que incluso el boxeador llegó a intentar subirse al vehículo policial para huir.
Tras la llegada de más patrullas, se consiguió reducir al hombre, que ha sido detenido por delitos de estafa, lesiones y atentado a los agentes de la autoridad. En cuanto a su acompañante, también un italiano de 21 años, que no participó directamente en la agresión, también fue detenido por un delito leve de estafa.
