El ayuntamiento y “sus gangrenas”

La gangrena o el engangrenarse, es la muerte segura o casi segura de cualquier “organismo vivo”. Ese es el estado del ayuntamiento de mi ciudad (y seguro que de muchos otros), que dicen que “es nuestro”, pero nunca lo fue; “es y fue de los mangoneadores del mismo, que sin pudor alguno lo llevaron a ese estado de semi muerte en que se encuentra”; y lo que se les ocurre a los pésimos mangoneadores de ahora, es subir impuestos, o sea lo de siempre. Para ver ello, no hay más que leer con detenimiento, todo lo que publicó del diario local “VIVAJAÉN”, en su número del trece de septiembre 2019; lo que ya representa un abuso incalificable.
A la vista de ello, los indefensos y muy esquilmados contribuyentes municipales; sólo nos queda (si ello fuera posible) el echar del mismo a la nueva invasión de malos administradores; hacer una investigación a fondo de la empresa (un ayuntamiento es sólo eso, una empresa) liquidar y expulsar todo lo que en ella sobra que es mucho, y buscar una empresa privada, que mediante contrato ajustado al máximo; y respondiendo al mismo, administre como debe dicha empresa; y la lleve al saneamiento necesario; o si no es posible, pedir auxilio al Estado central y que se haga cargo, de esta gangrena municipal, que por la cantidad de años que lleva engangrenándose, ya no tiene solución por sí misma y entren quienes entren, de los malísimos políticos que padecemos.
No hay nada más que analizar los últimos años de esta plaga… ¿Cuántos negocios se han cerrado por ruina de los mismos y cuántos abrieron nuevos y al poco tiempo tuvieron que cerrar por iguales circunstancias? ¿Qué opinan de todo ello los indefensos habitantes de la ciudad? ¿Por qué no se bajaron los salarios desde el alcalde (que cobra como un ministro en Madrid) hasta el último de los empleados del muy sobrecargado ayuntamiento? ¿Por qué se pagan en este engangrenado ayuntamiento sueldos tan altos y en relación al empleo general de la industria y el comercio, es que se consideran superiores a quienes tienen que forzosamente pagar impuestos para sostenerlos? No hablemos del abandono de responsabilidades en general, puesto que entonces, habría que echarlos a todos o casi todos y además pedirles daños y perjuicios. Veamos quién responde, abiertamente como yo denuncio y nos convence de que estoy en un error. Y como digo de mi ayuntamiento, podría decir (más o menos) en relación a autonomías, diputaciones, gobierno central y anexos; donde abundan los disparates más señalados y algunos de los cuales están en los juzgados, esperando..? “La bienvenida de los cigarrones”.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más) y
http://www.bubok.es/autores/GarciaFuentes