La Selección Española de Fútbol no está para componendas.
Y ahora que se acaba de alzar con un título de tronío como es su cuarta Eurocopa, aprovecha para pasar facturas pendientes al presidente del Gobierno, a Pedro Sánchez.
De hecho, en el vestuario existía un enfado mayúsculo por el feo que hace justo un año, en junio de 2023, les hizo el inquilino de La Moncloa a los jugadores después de haber ganado la Liga de Naciones.
El socialista se parapetó en una apretada agenda para no recibir al plantel del combinado dirigido por Luis de la Fuente.
Como tampoco gustó que durante el Mundial de Qatar, a finales de 2022, el residente monclovita no fuese a ninguno de los cuatro partidos de la Selección que por aquel entonces dirigía el controvertido Luis Enrique.
Y ese descontento fue larvándose a lo largo de los siguientes meses hasta llegar a la jornada del 15 de julio de 2024 cuando a los campeones de Europa les tocó ir a la sede del Ejecutivo para que Pedro Sánchez les recibiese.
Uno de los jugadores que reflejó de manera más evidente su contrariedad con el hecho de tener que estrecharle la mano al jefe del Ejecutivo fue Dani Carvajal, lateral del Real Madrid, quien pasó el trámite a la mayor velocidad posible y sin mirar a los ojos al mandatario socialista.
Qué grande Carvajal! Qué grande nuestra selección! Ayer prohíben a Pedro Sánchez entrar en el vestuario y hoy pasando del truño y del teatro que había montado Sánchez para que los suyos aplaudan “a su persona”. Las cara! Las caras! Esta selección nos representa. Viva España! 🇪🇸 pic.twitter.com/7UJLZG8Fgl
— Isabel Rábago 🇪🇸 (@RABAGOISABEL) July 15, 2024
Hasta Carlos Alcaraz, el reciente ganador de Wimbledon, le dio a ‘me gusta’ en la publicación de la foto subida por ‘Marca’:
El me gusta de Alcaraz en la publicación del gesto de Carvajal en Marca.
Estamos tan de vuelta. pic.twitter.com/d4FxjZ7IqE
— J † (@jbenttt) July 15, 2024
Posteriormente, durante la entrega a Pedro Sánchez de una camiseta conmemorativa por ese cuarto entorchado internacional, los jugadores aplaudieron (y no todos) de una manera bastante fría y desapasionada.
La estancia de los futbolistas y todos los miembros del equipo técnico en La Moncloa apenas rebasó el cuarto de hora y la gran mayoría lo hizo sin despedirse del presidente del Gobierno.
Tal era el cabreo de los componentes del combinado nacional que cuando se enteraron de la presencia de Pedro Sánchez en el palco del Estadio Olímpico de Berlín el día de la final frente a Inglaterra, la consigna fue unánime:
Que ni se le ocurra bajar al vestuario.
Lo que sí le aconsejamos desde Periodista Digital a los jugadores de la Selección Española es que se vayan preparando porque no sería extraño que, dado el carácter revanchista que adorna a Pedro Sánchez, este ordene a su ministra de Hacienda, la estrambótica María Jesús Montero, alguna inspección sorpresa para ver si alguno de los componentes del combinado de Luis de la Fuente está al día con el fisco.
