UN VISTAZO A LA PRENSA

Vomitivo: ‘El País’ acusa a VOX de ‘victimismo’ por denunciar las agresiones a sus afiliados

"No hay ningún agresor que no se presente como víctima", dice el diario de PRISA

Vomitivo: 'El País' acusa a VOX de 'victimismo' por denunciar las agresiones a sus afiliados
Los violentos independentistas de los CDR de Cataluña. EP

Subrayaba @ElentirVigo en Contandoestrelas este 3 de abril de 2019 que la progresiva radicalización del periódico del Grupo PRISA está dando lugar a unas noticias y artículos de opinión en los que se leen cosas que parecen calcadas de pasquines de la extrema izquierda (El miserable comentario de Ada Colau sobre las agresiones indepes a VOX: «es lo que estaban buscando»).

Y escribe Elentir (Las ‘pedradas’ de RTVE contra Vox dejan en bragas a los violentos de las CUP y los CDR):

Tras las agresiones sufridas por afiliados y simpatizantes de Vox el pasado sábado en Barcelona a manos de violentos separatistas, lo que cabría esperar de un medio que se dice democrático es una condena sin rodeos y sin matices de esa violencia.

Sobre todo teniendo en cuenta que esa violencia ha sido alimentada, en gran medida, por una de las más burdas campañas políticas y mediáticas de que hemos visto en España para demonizar a un partido democrático.

Una campaña plagada de mentiras y manipulaciones, y en la que El País también ha tomado parte.

¿Una agresión es menos condenable si el agredido lleva una bandera española?

Pues bien: lejos de rectificar, en vez de rebajar el tono a la vista de los efectos violentos que está teniendo esa campaña, lo que hizo este martes El País es reflexionar sobre esa violencia arremetiendo contra los agredidos.

Lo hizo en una noticia titulada «El huevo de la serpiente». Los dos primeros párrafos de la noticia son muy reveladores. El primero habla de la agresión que sufrió un simpatizante de Vox cuando acudía al acto de ese partido. En el segundo se lee lo siguiente:

«La escena resulta insoportable para cualquier espectador con un mínimo de humanidad. Pero la perspectiva cambia si se explica que el agredido lleva una bandera española. Algunos disculparán la agresión: no se le ataca a él, sino a lo que representa. Sucedió el sábado en Barcelona».

Cuando he leído la parte que pongo en negrita, he pensado que a continuación leería una reflexión lamentando que haya gentuza capaz de pegar a una persona por llevar una bandera de España. Nada de eso (Rosa Díez sacude una tunda brutal al ‘okupa’ Sánchez tras las agresiones contra VOX en Barcelona).

Acto seguido, El País comenta el discurso de Abascal en Barcelona y afirma:

«A muchos catalanes estas propuestas les producen estupor e indignación».

¿Y estar indignado te da derecho a pegarle a alguien una patada? Tras afirmar que los miembros de Vox son unos fascistas, franquistas y neonazis, el diario matiza:

«Hasta ahora no se puede acusar a Vox como partido de secundar actos violentos. Algunos de sus miembros sí han sido víctimas de ellos».

¿Hasta ahora? Da la sensación de que el firmante de la noticia está impaciente por ver a alguien de Vox cometiendo una agresión (Batalla campal: Los macarras indepes de los CDR intentan reventar a pedradas un acto de VOX en Barcelona).

Y es que la actitud pacífica de los miembros de Vox está echando por tierra la campaña de demonización de los medios progres.

¿Con qué cara llamas «fascista» a alguien que se manifiesta pacíficamente, mientras llamas «antifascista» a quien le agrede?

Lo que los medios izquierdistas nos vienen vendiendo en relación a Vox se resume bien en esta viñeta publicada el año pasado por @pildorarojamgzn:

El País, molesto con las agresiones porque «engordan a Vox»

En vez de intentar explicarnos qué narices tiene en la cabeza alguien capaz de atacar a pedradas a un afiliado de Vox simplemente porque no le gustan sus ideas, El País advierte:

«Las agresiones engordan a Vox. Sus responsables lo saben y aprovechan las redes sociales para multiplicar sus efectos».

Aquí podría haber añadido un apunte diciendo que agredir a otra persona está mal, especialmente si lo haces por intolerancia a sus opiniones, pero en vez de eso el diario socialista pone esto:

«El victimismo es un instrumento muy poderoso. Cohesiona al grupo y, de cara al exterior, genera empatía, solidaridad y finalmente apoyo o, al menos, no beligerancia. Ante una víctima uno se queda desarmado y sin argumentos; renuncia a rebatir y desiste».

Estas palabras me dejan perplejo (VOX adelanta a Podemos, que cae a 30 diputados y ya es sólo es quinta fuerza ).

En vez de criticar a los agresores, El País acusa a Vox de «victimismo» por denunciar las agresiones, porque al darlas a conocer le corta el rollo satanizador a medios como El País (eso es lo que quiere decir el diario cuando afirma que «uno se queda desarmado y sin argumentos»).

El diario socialista convierte a la víctima en agresor y da entender que Vox quiere vengarse

Pero el vomitivo artículo de El País no se limita a acusar de victimismo al partido de Abascal, sino que además intenta demonizar a Vox dando a entender que tiene el propósito de vengarse, aunque nunca haya contestado a ninguna agresión sino con denuncias en los tribunales:

«Lo más peligroso del victimismo es que otorga a quienes lo interiorizan el sello de la impunidad. No hay ningún agresor que no se presente como víctima. Cuando uno ha acumulado suficientes mártires y ofensas, verdaderas o inventadas, tiene carta blanca para vengarse».

Me pregunto qué diría El País si alguien hiciese una reflexión tan nauseabunda pero cambiando los agredidos de Vox por una mujer que padece malos tratos o por un homosexual que sufre una agresión por el mero hecho de serlo.

A El País parece no molestarle tanto esas agresiones como el hecho de que Vox las denuncie. Con ello el periódico se retrata.

Ante actitudes así, lo más indignante es que el diario de PRISA aún se atreva a ir repartiendo carnets de demócrata, cuando demuestra que no ha aprendido lo más básico en democracia: cuando hay una agresión por motivos políticos, lo que procede es condenarla y punto.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído