Salió de su despacho con un sobre en la mano que se negó a entregar y que destruyó alegando que eran datos personales
El PSOE parece tener una varita mágica: con tan solo un «toque» consiguió que ADIF le inyectase 21 millones de euros a Extraco, la constructora gallega de la que es propiedad Pablo Prada, un amigo del gerente socialista Xoan Cornide.
Mientras otros trabajan toda una vida para pagar una hipoteca, Prada se embolsó, gracias al ‘dedazo’ del ministro de Fomento, 3.500 millones de las antiguas pesetas en tan solo 16 meses.
El periódico ‘El Mundo’, el que destapó el caso, ha tenido acceso varios correos electrónicos bastante comprometedores enviados por Pablo Prada a Xoan Cornide, en los que pueden leerse párrafos como el siguiente:
«Xoan, me han comentado personas cercanas al partido, que ya te diré el próximo miércoles, que ya le han pegado un toque a Antonio González Marín [presidente de Adif] por la obra que te acompaño y que como puedes comprobar quedamos muy bien en la económica, así que, convenía que tú hicieses las gestiones que estimes conveniente para reforzar»
Prada no desvela en el email los nombres de las personas próximas al PSOE que llamaron al presidente de Adif, pero asegura al gerente socialista que le dará los nombres.
Todo estaba calculado, hasta el punto de transmitirle, también vía e-mail, las «instrucciones» a seguir, en las que el primer paso era el siguiente:
«1- Dejar pasar el Congreso el próximo fin de semana para hablar con Pachi y me facilite la entrevista con José Blanco»
Además,este correo acaba con una clara muestra del «enchufismo» en el caso:
«Considero que sería muy interesante y dado el grado de amistad que me indicaste que tienes, formalizaras una entrevista con la nueva Secretaria de Infraestructuras»
Y tan solo 11 días después de la toma de posesión de José Blanco, en abril del 2009.
Tres meses más tarde, el 3 de julio de 2009, el «toque» de Cornide y José Blanco a Adif daba resultado, dando a la empresa gallega la primera de una lista de adjudicaciones: las obras en el AVE en el tramo de Silleda, en Pontevedra, con las que se embolsó el primer millón y medio de euros.
UN «MISTERIO» SIN RESOLVER
El 15 de octubre de 2009 varios inspectores de la Comisión Nacional de Competencia se personaron en las oficinas de Extraco en el marco de una investigación sobre las constructoras gallegas acusadas de repartirse licitaciones en Galicia mediante pactos de precios ilegales.
En ese momento Prada ordenó a los agentes de seguridad de la empresa que les impidiese el acceso, consiguiendo así «despistarlos» durante dos horas, tras las que uno de sus consejeros delegados, presentándose como el «Señor Prada» salió de su despacho con un sobre en la mano que se negó a entregar y que destruyó alegando que eran «datos personales».
A día de hoy todavía se desconoce qué contenía ese sobre, por el que la CNC abrió un expediente sancionador a Extraco de 300.000 euros por obstrucción a la inspección y ocultación de datos.