Cajón de Sastre

Rufino Soriano Tena

A ver qué pasa.

Pues sí, señor. Aquí ´me ando´ sin saber lo ´que hago´. Y es la realidad. Mi señoría, a los noventa y dos tacos (de almanaque o calendario) no sería extraño que adolezca o padezca esa dolencia que uno ha denominado «acarajotamiento senil» que seguramente vuesarcedes, si no me leyeron en su día, no han ni zorra idea de en qué consiste ese mal. Sin embargo, no sufran porque uno les va a ilustrar acerca de cuál es esa enfermedad, ya que no tengo más que recordar lo que escribí  en unas cuantas chirigotas, cuchufletas o rechiflas que vieron la luz precisamente tiempo ha en este mismo periódico que Dios guarde para gloria y disfrute de su egregio Director, dicho así, con mayúscula, para no hacerle de menos sino de más, pues en tal estima le tengo aunque no le conozca tan siquiera. Y esto no es malo habida cuenta de que sea real aquel refrán o dicho malévolo que adoctrina que ´del jefe y del mulo mientras más lejos más seguro´. En aras de esta seguridad y bajo el cobijo de un gobierno en funciones que, presidido por el Doctor Sánchez, don Pedro, cuyo doctorado no sé si también está en funciones, ni si funciona como tal o qué; bajo el cobijo, reitero, de tan egregio jerarca, cómo podría mi excelsa señoría no contarles a vuesarcedes tanto lo del acarajotamiento como lo de por qué ´aquí me ando sin saber lo que hago´. Pero vayamos por orden que «ubi non es ordo ibi es confusio».

Hablaré, pues, en primer lugar de la patología citada. Así, de momento, recuerdo cuatro títulos de los posts a que me he referido, que son «¿Padece mi señoría acarajotamiento severo?», «De mi acarajotamiento  y del trío…», «De cómo se encuentra mi señoría» y «La pandemia del acarajotamiento». Y de momento, quizá vuesarcedes tengan suficiente con pinchar aquí y leer. Y visto que hayan -si la ven- la susodicha chirigota y sus enlaces, si son listos -aunque hay mucho tonto entre los lectores y no se sabe si vuesarced es uno de ellos- ya habrán adquirido una idea de lo que es el acarajotamiento senil y sus consecuencias.

En segundo lugar, les aclararé eso de que estoy escribiendo esta chirigota o rechifla sin saber lo que hago. Porque acontece que la intríngulis o meollo de cómo se ha de presentar este post para su publicación es algo que uno está realizando por primera vez en esta nueva presentación y no sé cómo saldrá, aunque… ´si sale con barbas, San Antón, y si no, la Purísima Concepción´.

En efecto, esto es un prototipo. Espero que esté siguiendo el procedimiento adecuado y que vuesarcedes puedan solazarse con la lectura de esta chanza. ¡Olé! ¿O no?

 

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Autor

Rufino Soriano Tena

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Granada y Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Comillas (ICADE) de Madrid

Rufino Soriano Tena

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Granada y Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Comillas (ICADE) de Madrid

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