El día en que el dinero de un tipo de Norte desnortado (sin patria) termine de acabar con Grecia habrá muerto algo importante en nuestra vida
(Xabier Pikaza).- El tema de la paz económica y social en Grecia no es sólo un problema griego, sino también europeo, humano y cristiano.
No es fácil de resolverlo, tiene muchos matices, difíciles de coordinar, pero puedo ofrecer algunas reflexiones para entenderlo mejor.
Las haré como europeo (aunque no me gusta nada la forma actual de re-construcción de Europa), las haré como amigo de Grecia y su cultura, en plano general (de pensamiento antiguo) y de humanidad y justicia actual.
Ciertamente, los griegos actuales no son los helenos antiguos, ni son los bizantinos… pero conservan su herencia de libertad y humanidad, que en estos momentos resulta imprescindible para Europa. El día en que el dinero de un tipo de Norte desnortado (sin patria) termine de acabar con Grecia habrá muerto algo importante en nuestra vida.
He pasado alguna temporada de estudio en Grecia. Estuve allí «encerrado» el año 1974, en estado de sitio, cuando la caída de los últimos coroneles, cuando el riesgo de guerra Turquía y el comienzo de la «democracia» actual (por intervención americana). Bajé a la plaza de la Concordia con la vela de Pascua/Paz en la mano, pero supe que no habían ganado los griegos (ni los turcos), sino los poderes militares de turno… Pensé entonces mucho entonces en el tema (encerrado en una casa/colegio, con los tanques en la calle), desde el encerramiento.Cuando salí por fin llevaba el gozo y tristeza de Grecia en el alma.
Desde aquella situación y la nueva crisis quiero trazar algunas reflexiones. Os dejo con el bombero/pirómano de la Gran Europa (imagen 1), con el Atlas griego (imagen 2), llevando el mundo en sus espaldas (aunque quizá sería mejor que hubiera puesto a Sísifo, a quien dejo para otro día).
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