"Soy injustísimo con todos los jugadores. El problema no es mío, es que solo tengo 18 jugadores a elegir. Estoy encantado con Bartra, que es por quien me preguntas"
El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, ha asegurado este martes que su «obsesión» es lograr que el equipo sea mejor «continuamente» para poder aspirar a todo, y hacerlo con una gestión propia de la que no piensa deshacerse y que tiene como base el «sentido común».
«Firmaría encajar un gol en cada partido y ganarlo. El objetivo es ganar, y ser mejor que el rival. Aún haciendo eso, algún partido perderemos. Aquí va a haber críticas siempre, se trata de afrontarlas con la mayor naturalidad y mi obsesión es hacer mejor al equipo continuamente, a veces lo consigo y otras no», manifestó en rueda de prensa.
Así, para Luis Enrique, este ‘run run’ no tiene que «descentrar» al equipo sino motivarlo:
«Gestionar un grupo de deportistas es parecido a lo que hace un profesor con sus alumnos en la ESO. Sentido común, que es el menos común de los sentidos. Así gestiono mis equipos».
En base a este sentido común y al trabajo, espera no fallar. «Que fallen todos menos nosotros, pero eso tiene una dificultad añadida. El año pasado se vio a tres equipos que no perdieron casi puntos, fue emocionante. Este año Valencia y Sevilla tienen buen pinta y Atlético y Madrid estarán arriba con nosotros seguro», desgranó sobre quién podría pugnar por la Liga.
De momento afronta el partido de este miércoles en Málaga «como cualquier partido fuera de casa». «Las complicaciones aparecen y surgen solas, tenemos el objetivo como hace tres días de generar más cosas que el rival y de acercarnos más a la victoria por ser mejores, en definitiva», explicó.
«Sin ninguna duda, vamos a mejorar cosas en defensa seguro y no significa que no vayamos a perder algún partido y a encajar goles. Hay que mejorar, hay margen. En estas jornadas hemos hecho algunas cosas no de la manera más adecuada, pero como no hemos encajado parece que están bien».
Del Málaga le preocupa «todo», sobre todo que el equipo actúe como un «bloque». «Tiene un referente arriba como Santa Cruz, o Amrabat. Me preocupan Duda, el doble pivote con Darder y Camacho, su potencial a balón largo y balón parado. El entrenador, Javi Gracia, lo conozco perfectamente y le considero muy preparado, que le gusta asociarse. Otro partido que nos debe servir como motivación para seguir sumando puntos», destacó.
Preguntado por las rotaciones, tiró de tópico pero con su personalidad bien marcada:
«Soy injustísimo con todos los jugadores. El problema no es mío, es que solo tengo 18 jugadores a elegir. Estoy encantado con Bartra, que es por quien me preguntas. No se trata de ser injusto o justo, sino de ser entrenador».
«Están bien. Han entrenado como el resto del equipo, mañana tendrán el alta y estarán a disposición del entrenador», aseguró sobre Neymar y Rakitic, que ya han dejado atrás las molestias en el tobillo y la contusión en el pie izquierdo, respectivamente.
En cuanto a los centrales, celebró el buen hacer de Mathieu en este inicio de temporada –«para eso lo fichamos, para que sumara sus características y calidad individual a lo que teníamos»– y se mostró encantado con Piqué.
«Lo veo con una actitud maravillosa, tengo mucha química con ‘Geri’ y me encanta su manera de ser, divertido, optimista, trabajador, ha superado sus problemas de cadera y le veo en perfectas condiciones para ayudarnos».
