El Olympique de Lyon y el Besiktas han sido excluidos de cualquier competición europea la próxima temporada, además de multados con 100.000 euros por la invasión de campo y los incidentes violentos acontecidos el pasado jueves durante la ida de los cuartos de final de la Europa League, según ha anunciado la UEFA en un comunicado en su página web.
Sin embargo, la sanción queda en suspenso durante los dos próximos años. Es decir, la UEFA aseguró que se hará efectiva si los hinchas de ambos equipos vuelven a protagonizar incidentes en ese periodo. En el caso contrario no debería ser efectiva. Durante el encuentro de la semana pasada en el Parc Olympique Lyonnais, multitud de aficionados franceses y turcos protagonizaron un enfrentamiento que ya había comenzado horas antes en los alrededores del estadio francés, y que una vez dentro llegó incluso a retrasar el comienzo del encuentro al menos 45 minutos. La UEFA abrió un expediente disciplinario al día siguiente contra la actuación de ambos clubes, señalando que el club francés contaba con una organización insuficiente y no cumplió las normas de seguridad al permitir la entrada de bengalas dentro del recinto, además de autorizar la presencia de aficionados en las escaleras de las gradas impidiendo la correcta salida. Por su lado, también acusó directamente al Besiktas por los disturbios ocasionados por parte de sus seguidores durante el choque, con la introducción de bengalas al estadio y los continuos lanzamientos de objetos al terreno de juego. «El CEDB (Comité de Control, Etica y Disciplina) ha considerado que los seguidores de ambos clubes eran responsables de los disturbios de la multitud en el partido», informó la UEFA en un comunicado, antes de que ambos equipos vuelvan a verse este jueves las caras en la vuelta de cuartos de final en el Vodafone Arena.
