Los acontecimientos producidos en el entorno del Sevilla FC en los últimos días han incendiado sobremanera a la afición y al club, y han perturbado el estado de optimismo existente en un equipo que está muy ilusionado por la nueva etapa que se abre con Eduardo Berizzo como nuevo entrenador sevillista. La marcha de Vitolo (o si se le pregunta a la hinchada hispalense, la ‘fuga’ o la ‘traición’) no sólo ha sido inesperada, polémica y ha dejado una mala imagen de la junta directiva y de la entidad, sino que supone también un destrozo importante a nivel deportivo.
Porque Vitolo era capitán y jugador franquicia del club. Un extremo en el mejor momento de su carrera, cuyo perfil ahora falta en la plantilla del técnico argentino. Es por eso que el Sevilla se va a tener que poner manos a la obra para encontrar un sustituto (o sustitutos) en el mercado y lo antes posible. Berizzo quiere tener cuanto antes a todos los efectivos de su nueva plantilla al completo para trabajar con todo el grupo y llegar en perfectas condiciones al inicio de la temporada.
Mientras la entidad decide qué tipo de acciones legales emprende para defender sus derechos y su honor ante lo que considera ha sido un movimiento desleal por parte del que hasta ayer era su futbolista, varias operaciones que estaban sobre la mesa del Sevilla hasta hace bien poco se reactivan. De un lado, los nombres de Nolito y Jesús Navas vuelven a saltar a la palestra por ser futbolistas que ocupan demarcaciones similares a las de Vitolo y tienen un perfil parecido (desequilibrantes, rápidos al espacio).