La Bolsa de Nueva York comenzó hoy la semana con sólidos avances y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, subía el 0,94% en la media sesión, con la mirada puesta en la reunión mensual que la Reserva Federal de Estados Unidos mantendrá el martes sobre su política monetaria.
Hacia el ecuador de esta primera sesión de la semana, el Dow Jones avanzaba 99,30 puntos y rondaba los 10.707,15, mientras que el S&P 500 escalaba 11,28 unidades, hasta los 1.136,87 enteros, lo que supone un ascenso del 1%.
A esta ahora, el índice compuesto que mide la evolución del mercado tecnológico Nasdaq, también con sede en Nueva York, subía el 1,02%, ya que ascendía 23,7 puntos y se situaba en 2.339,31 unidades.
Estos avances tenían lugar al comienzo de una semana en la que los inversores estarán muy pendientes de la reunión que mantendrá en Washington la Reserva Federal para repasar su política monetaria.
Los analistas apuestan a que no se tocarán los tipos de interés de referencia en Estados Unidos, pero dudan de si el banco central de este país anunciará nuevas medidas para atajar la desaceleración en el crecimiento de la primera economía mundial.
A la espera de que llegue ese día, el mercado neoyorquino abrió hoy al alza y dio continuidad así a las tres semanas consecutivas que el viernes logró cerrar en positivo, aunque lo hizo con bastantes dificultades, y el Nasdaq acumuló ocho jornadas consecutivas de subidas.
Antes de llegar a la media sesión de hoy se conoció que la recesión económica de Estados Unidos acabó oficialmente en junio de 2009 y tuvo una duración de 18 meses, lo que la convierte en la más larga desde la II Guerra Mundial, según cálculos del National Bureau of Economic Research (NBER), un panel integrado por economistas con sede en Cambridge, Massachusetts.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se mostró cauto ante este anuncio e insistió en que la situación sigue siendo muy difícil para muchos ciudadanos que «luchan» para salir a flote.
Después de estas declaraciones, el sector energético era uno de los que más subían, en torno al 1,46%.
El domingo el pozo Macondo de la empresa BP se declaró oficialmente extinguido, tras cinco meses de un derrame que vertió cinco millones de barriles de crudo al Golfo de México y se convirtió en la peor catástrofe ecológica en Estados Unidos.
Las acciones de la petrolera británica que cotizan en este país subían a esta hora un 1,55%, al tiempo que Exxon Mobil y Chevron, que forman parte del Dow Jones, subían el 1,11% y el 1,64%, respectivamente.
Como ellos, prácticamente todos los valores de ese índice registraban subidas, aunque las más pronunciadas eran las de las entidades financieras American Express (3,31%) y JPMorgan Chase (1,75%), el grupo especializado en reformas del hogar Home Depot (1,77%), la química DuPont (1,71%) y el líder mundial del aluminio, Alcoa (1,69%).
La única excepción era la del mayor fabricante mundial de tecnología de redes informáticas, Cisco, que a esta hora bajaba el 0,79%, en un día en que el conjunto del sector tecnológico subía el 0,73%, después de que IBM anunciara la compra de Netezza por 1.700 millones de dólares.
Los títulos de IBM, la mayor compañía del mundo especializada en servicios informáticos, subían el 1,04% en la Bolsa de Nueva York, mientras que los de Netezza, especializada en almacenamiento y análisis de datos informáticos, se apreciaban un 12,64% y se negociaban a 27,71 dólares.
Ese último precio supera los 27 dólares ofrecidos por IBM para cerrar la compra de Netezza (que ya suponían una prima del 9,8% respecto al precio de cierre del viernes), lo que da a entender que los inversores confían en que aparezca alguna otra compañía interesada en esta misma empresa y presente una oferta de compra más elevada.
En otros mercados el crudo subía el 1,33% para negociarse a 74,99 dólares por barril, el oro se negociaba al precio récord de 1.281,2 dólares por onza y la rentabilidad de la deuda a diez años bajaba hasta el 2,72%.
