El presidente de la Ceoe, Joan Rosell, ha reclamado este jueves a los políticos amplitud de miras y «tolerar, entender, valorar y estudiar las opiniones de cualquier sociedad, aunque sólo sea una parte de la sociedad», y ha considerado que hay que dejar espacios para que todo el mundo se encuentre cómodo.
Lo ha dicho durante el acto de entrega de las Medallas de Honor y los Premios Carles Ferrer Salat de Fomento del Trabajo, en presencia del Rey Felipe VI, donde ha constatado que «las unanimidades y las uniformidades se han acabado», lo que requiere comprender y respetar las diferencias para que no se vuelvan antagónicas. «Un empresario como yo que vive prácticamente en el puente aéreo entre Madrid y Barcelona ve con cierta desilusión y con mucha preocupación que no hay entendimiento», ha lamentado, y ha señalado que todo el mundo tiene culpa de esta situación, también los empresarios. A juicio de Rosell «es tiempo de escuchar opiniones, algunas muy fundamentadas, y reflexionar inteligentemente sobre todas» ellas. «Es la hora de la gran política, siempre con concordia. Los gritos y ruidos son demasiado fáciles de hacer. Ahí quedan, pero no construyen puentes ni arreglan los problemas del día a día de la sociedad», ha sostenido. En la entrega de premios han participado también el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; la vicepresidenta del Gobierno central, Soraya Sáenz de Santamaría; la delegada del Gobierno en Cataluña, Llanos de Luna; el presidente de la Ceoe, Joan Rosell; el conseller Jordi Baiget; el segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls.