El producto interior bruto (PIB) de Francia registró en el segundo trimestre del año una expansión del 0,7% respecto a los tres meses anteriores, cuando creció a un ritmo del 0,2%, lo que supone una décima más en comparación con la primera estimación debido a que la balanza comercial ha sido más favorable de previsto, según informó el Instituto de Estadística galo (Insee).
Así, la contribución de la balanza comercial fue del -0,3%, frente a la anterior estimación del -0,4%, ya que se ha revisado a la baja el crecimiento de las importaciones y se ha aumentado el de las exportaciones.
En concreto, las importaciones aumentaron en el segundo trimestre un 3,9%, frente al 2% del trimestre precedente, mientras las exportaciones se incrementaron un 2,8%, en comparación con el 4,5% de los tres primeros meses de 2010.
Por otro lado, el consumo de los hogares franceses se recuperó en el segundo trimestre, después de no registrar ningún crecimiento en los tres primeros meses del año. En concreto, el consumo de los hogares aumentó un 0,3% entre abril y junio, mientras que el del Gobierno creció un 0,4%.
