El coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Cayo Lara, ha instado este miércoles al Gobierno a que exija responsabilidades a las autoridades alemanas para que respondan tanto en sentido práctico como político por la crisis de los pepinos y a que, por otro lado, reclame a la Comisión Europea un plan para cubrir las «enormes pérdidas» del sector.
Según un comunicado, Lara ha asegurado que el Gobierno español «debe exigir cuanto antes responsabilidades a las autoridades alemanas partiendo del principio de que ‘el que rompe, paga’, pues aquí se ha roto la normalidad del mercado y eso debe tener un precio», tras constatar que las autoridades alemanas actuaron «de forma incompetente, banal y gratuita» al atribuir a una partida de pepinos españoles el origen de la peligrosa bacteria ‘Escherichia coli’.
Lara ha considerado que pese a la «buena noticia» de que los ‘híper’ alemanes han empezado a desbloquear la compra de productos agrícolas españoles después de la rectificación por parte de las autoridades germanas de las acusaciones vertidas «cuando no tenían ninguna prueba científica» contra los pepinos españoles, «la situación dista mucho de poder ser calificada como normal».
Asimismo, ha denunciado lo que ha calificado como «nacionalismo alimentario» de los alemanes y ha tachado de «intolerable» su cierre de filas, en alusión a la defensa que la ministra alemana de Agricultura, Ilse Aigner, ha hecho este mismo día de la gestión de la alerta alimentaria, justificando los «graves errores» de su colega de Hamburgo, Cornelia Prüfer-Storcks. A su juicio, esto «es algo que precisa de una respuesta diplomática inmediata».
Pero el principal dirigente de IU ha reclamado al Gobierno una «doble acción» cuya «segunda vía» debe ser reclamar a la Comisión Europea de un plan que cubra las «enormes pérdidas económicas» de los agricultores españoles. En este sentido, ha considerado necesario que se liberen «ayudas de emergencia» para paliar «los fallos» producidos y «para que quede claro que a la UE le importa el futuro» de los productores españoles.
Además, Lara, quien llegó a la política procedente del sindicalismo agrario, ha reclamado al Gobierno que «en estrecha colaboración con los representantes de los profesionales afectados prepare de inmediato una campaña a nivel nacional y europeo para lograr el objetivo prioritario de que se recupere la confianza» en los productos agrícolas españoles, de los cuales ha destacado «el alto nivel de seguridad y calidad que tienen debido principalmente a la constancia y al esfuerzo de años de nuestros agricultores».
