La historia de los 30.000 millones de euros del rescate bancario se ha convertido en el auténtico enigma de otro mundo.
El Gobierno Rajoy aseguró que llegarían en julio y, dos semanas después, aún no se sabe a ciencia cierta cuándo se producirá su desembolso.
Mientras tanto, el portavoz de la Comisión Europea, Ryan Heath, felicitaba a España ayer por no haber solicitado la ayuda de emergencia de los 30.000 millones de euros del rescate a la Banca, cuando el Ministerio de Economía aseguraba hace una semana que era cuestión de «días» la entrega de estos fondos.
«No hemos recibido ninguna petición para activar la ayuda bancaria de emergencia, aunque la posibilidad obviamente existe. Utilizar los fondos de emergencia depende de que recibamos una petición en primer lugar», aseguran en la Comisión Europea a la agencia Europa Press.
Estas fuentes indican que el plan original es desembolsar la ayuda en octubre.
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, aseguró que este dinero llegaría en julio.
Pero los fondos los tenía que solicitar a Bruselas el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que debía esperar para ello al informe sobre las entidades financieras individuales que las auditoras entregaron al Banco de España el 31 de julio de 2012.
Confusión
A partir de ahí, entramos en la ceremonia de la confusión. Fuentes de Economía aseguraron el domingo 5 de agosto que la resolución del tema era cuestión de días.
Sobre este adelanto de los 30.000 millones de euros, fuentes oficiales indicaban a este periódico ayer mismo que estos fondos “no hay que pedirlos. Ya están. Lo que hay que pedir es lo concreto para Bankia”.
Y reconocían después que esa cantidad también había que solicitarla para Novagalicia Banco y para CatalunyaCaixa. Medios financieros aseguraron que Bankia no tiene que realizar ningún trámite.
Desde el 20 de mayo se conoce que necesita 19.000 millones, que recoge el plan de viabilidad de la entidad. Novagalicia precisa 6.000 millones de euros, y CatalunyaCaixa, 5.000 millones.
La aparente contradicción de todas estas declaraciones está desatando todo tipo de especulaciones. “A lo mejor se lo están pensando en Bruselas y si va a haber un rescate al país, quieren hacer alguna modificación, teniendo en cuenta que luego llegarían Italia y Francia”, aseguran medios financieros.
Las fuentes de la Comisión Europea han negado que España haya pedido que el fondo de rescate compre deuda. El vicepresidente de la CE, Olli Rehn, advirtió ayer de que los Estados de la zona euro en dificultades que soliciten recurrir a los fondos de rescate estarán sujetos a “estrictas condiciones”.