En Israel, desde los sucesivos derrames cerebrales de Ariel Sharon hay menos crímenes. ¿Es secreto? No es que haya replantearse el sentido de la vida a los delincuentes, sino que estos, al igual que el resto del país, permanecen pegados a la televisión día tras día, limitando al máximo su actividad diaria.
Los delitos como robos de coches y hurtos domésticos se han reducido más de la mitad, según informó la policía este martes.
En los tres primeros días después de que Sharon sufriera el derrame cerebral, sólo se registraron 865 robos domésticos en comparación a los 1.739 correspondientes a estas fechas del pasado año.
«Es obviamente más difícil asaltar una casa mientras su dueño está atónito frente a la televisión, sin embargo, es también posible que algunos de los ladrones hayan decidido por sí mismos permanecer en casa para seguir la salud del señor Sharon».
