Estaba en casa de su amiga y jefa cuando el primate de 90 kilos la atacó, dejándola ciega y desfigurada
Charla Nash, la mujer a la que el chimpancé de una amiga arrancó la cara y las manos en el año 2009, ha demandado al estado de Connecticut por 150 millones de dólares en daños y perjuicios.
Con una gasa blanca alrededor de la cabeza, Nash, de 60 años, se ha sometido a una cirugía de trasplante de cara entre otras. Además pasó por un doble trasplante de mano fallido.
INMUNIDAD ANTE LAS DEMANDAS
«Quiero mi día en un juicio», dijo Nash en declaraciones a la agencia Reuters, haciendo referencia a la decisión de los tribunales de denegarle su posibilidad de demandar al estado de Connecticut declarando su inmunidad ante las demandas.
«Esto nunca debería haber pasado», consideró Nash.
Charla Nash estaba en Stanford, en casa de su amiga y jefa, Sandra Herold, cuando el chimpancé y mascota de Herold, Travis, la atacó, dejándola ciega y desfigurada.
El animal fue herido de muerte disparado por un oficial de la policía.
«Este tipo de animales exóticos no tienen cabida en los hogares. Tienen que estar en su entorno que es donde debería haber estado Travis»,
consideró Nash, que vestía un sombrero blanco con las alas bajas para proteger su cabeza, todavía herida.
SE SIENTE ATRAPADA
Nash envió un vídeo de siete minutos a las autoridades describiendo su vida en Boston, convaleciente y completamente dependiente de la atención médica.
«Me siento atrapada, como si estuviera en una caja».
El animal de 90 kilos en propiedad de un particular era en palabras de Nash, «un accidente a punto de pasar» del que el Estado debería haberse ocupado.
En 2012, Nash llegó a un acuerdo sobre una indemnización por valor de 4.000.000 dólares con los herederos de Herold, que murió en 2010.