Es kafkiano.
La solidaridad ciudadana que permitió la repatriación de Ángela Agudo, la joven valenciana que sufrió un brutal accidente de moto en Tailandia, se ha visto empañada por una inesperada carga fiscal.
La familia de la joven de 24 años, que permanece en estado vegetativo, deberá abonar más de 135.000 euros en impuestos por las donaciones recibidas para cubrir los gastos médicos y de repatriación.
El caso de Ángela Agudo ha conmovido a España desde que en octubre de 2024 sufriera un accidente mientras estaba de vacaciones en la isla tailandesa de Samui.
La gravedad de sus lesiones y los elevados costes médicos en el país asiático llevaron a su familia a iniciar una campaña de crowdfunding que logró recaudar una suma ligeramente superior a los 285.000 euros.
La mitad de este monto se destinó al pago de un avión medicalizado privado para trasladar a Ángela de vuelta a España, después de que el Ministerio de Defensa denegara la petición de un transporte militar médico.
El coste diario de la UCI en el hospital tailandés ascendía a 5.000 euros, lo que generó facturas astronómicas que la familia ha hecho públicas en un ejercicio de transparencia.
Desde su ingreso en el Hospital La Fe de Valencia en noviembre de 2024, la evolución de Ángela ha sido lenta pero positiva y constante.
La joven ha logrado abrir uno de sus ojos, aunque todavía no responde a estímulos.
«Ver ese verde reflejado en su pupila es un rayito de luz que nos ayuda a sentirla más cerca. Aunque es duro, muy duro», expresaron sus seres queridos a través de la cuenta de Instagram ‘Todos somos Ángela’.
Sin embargo, la alegría por estos pequeños avances se ha visto ensombrecida por la notificación de Hacienda.
La familia ya ha abonado 32.000 euros a la Agencia Tributaria y se enfrenta a un pago adicional de 104.000 euros en las próximas fechas.
Esta situación ha generado un debate sobre la fiscalidad de las donaciones en España, especialmente en casos de emergencia médica.
En un gesto altruista, los allegados de Ángela han donado 78.000 euros a la Fundación Ángel Nieto, dedicada a prestar ayuda a víctimas de accidentes de tráfico.
El hermano de Ángela explicó la elección de esta fundación: «Pensamos en varias asociaciones, pero por lo que le pasó a mi hermana y porque también soy un fanático de las motos y fan de Ángel Nieto, creímos que era la mejor opción donar el dinero a esta asociación sin ánimo de lucro».
La familia se enfrenta ahora a una compleja situación fiscal.
Según la normativa autonómica sobre el impuesto de sucesiones y donaciones, deberán «tributar casi el máximo«.
Esta carga impositiva ha generado indignación en las redes sociales y ha llevado a muchos a cuestionar la idoneidad del sistema tributario en casos de emergencia humanitaria.
El caso de Ángela Agudo pone de manifiesto las complejidades del sistema fiscal español y plantea interrogantes sobre la necesidad de revisar la normativa en situaciones excepcionales.
Mientras tanto, la joven continúa su lenta recuperación en el hospital, rodeada del amor de su familia y del apoyo de miles de personas que siguen de cerca su historia.
La familia mantiene la esperanza en la recuperación de Ángela, aunque son conscientes de que el proceso será largo.
«Que su cabecita empiece a cumplir órdenes sencillas y podamos encontrar la manera de comunicarnos, aunque todavía no pueda ser con palabras, es uno de nuestros objetivos», han compartido en redes sociales.
El caso de Ángela Agudo:
- El accidente ocurrió durante unas vacaciones en la isla tailandesa de Samui, un destino popular entre los turistas españoles.
- La campaña de crowdfunding se volvió viral en redes sociales, logrando recaudar más de 285.000 euros en poco tiempo.
- El Ministerio de Defensa negó el uso de un avión militar para la repatriación, lo que obligó a la familia a contratar un vuelo medicalizado privado.
- El coste diario de la UCI en Tailandia (5.000 euros) superaba con creces lo que habría costado en España.
- La Fundación Ángel Nieto, a la que se donaron 78.000 euros, lleva el nombre del famoso piloto de motociclismo español.
- La familia ha mantenido una total transparencia, publicando todas las facturas y gastos en redes sociales.
- El caso ha generado un debate sobre la necesidad de revisar las leyes fiscales para situaciones de emergencia médica.
- La cuenta de Instagram ‘Todos somos Ángela’ se ha convertido en un punto de encuentro para miles de seguidores que apoyan a la joven y su familia.
- El hecho de que Ángela haya logrado abrir un ojo se considera un hito importante en casos de pacientes en estado vegetativo.
- La historia ha unido a la comunidad de Godelleta, el pueblo natal de Ángela, donde se han realizado varios eventos solidarios.