Han sido 48 interminables días de cacería por las montañas Pocono del noreste de Pennsylvania, pero al fin ha caído.
Es Eric Frein, de 31 años, quien en septiembre de este año asesinó a un oficial e hirió a otro, antes de esconderse en bosques impenetrables, complejas cuevas, escuelas y refugios.
Cientos de agentes se las vieron y desearon para dar con el paradero de este hombre experto en técnicas de supervivencia, operativo que ha costado la frioleta de 10 millones de dólares.
El fiscal del distrito Pike Raymond Tonkin, quien solicitará para él la pena de muerte, informó ste viernes 31 de octubre de 2014 que la captura aportó un poco de tranquilidad a la región después de «una pérdida inimaginable de proporciones innombrables».
RECOMPENSA
El Gobierno había ofrecido una recompensa de 1,6 millones de dólares a quien aportara datos que llevasen a su captura. Frein se entregó alrededor de las 6 de la tarde del jueves a un equipo de policías federales que lo hallaron en el hangar a unos 48 kilómetros de las barracas rurales donde habría atacado a los patrulleros el 12 de septiembre.
La tranquila captura de Frein, quien se arrodilló y puso sus manos en alto cuando alguaciles se le acercaron, terminó con semanas de tensión y agitación en la zona, ya que las autoridades se vieron obligadas a cerrar escuelas, cancelar eventos al aire libre y cerrar carreteras para perseguirlo.
Los vecinos se cansaron del zumbar de los helicópteros, mientras los negocios locales sufrieron fuertes pérdidas y las autoridades de la ciudad cancelaron un desfile popular de Halloween.