Los detalles importan. Y en el mundo del periodismo, mucho más, porque afectan a personas e instituciones.
Milagros Pérez Oliva, Defensora del Lector de El País, dedicó hace diez días su artículo dominical a la autocrítica precisamente con una columna titulada Pequeños detalles que dañan la imagen.
Hoy habrá visto que, a pesar de sus esfuerzos, se ha vuelto a cometer un desliz que el Ayuntamiento de Arganda se ha encargado de que El País corrija, en la edición online editado el artículo, y en la edición de papel a través de una fe de errores.
Porque para los habitantes de Arganda no es lo mismo acumular el mayor porcentaje de paro de la Comunidad de Madrid, que ser la ciudad de la región donde más ha aumentado el desempleo.