Murcia es el foco esencial este 5 de abril de 2017 que podrán hallar en las tribunas de opinión de la prensa de papel.
Muchas de ellas están enfocadas por el lado de que a Rajoy nunca le importó la presunción de inocencia de Sánchez, sino en realidad lo que quería es no perder el poder en una comunidad autónoma.
Federico Jiménez Losantos, en El Mundo, considera que Pedro Antonio Sánchez se ha visto forzado a dimitir porque creyó que Rajoy no se lo devoraría como a otros políticos:
Sánchez ha dimitido porque pensó que esa costumbre caníbal de Rajoy no le alcanzaría.
Santiago González cree que Albert Rivera se ha precipitado en el caso de Murcia pidiendo una dimisión que en otras autonomías o Ayuntamientos como Andalucía o Granada ha optado por la táctica del avestruz:
Se ha cargado la presunción de inocencia, la igualdad de los españoles ante la ley y ha mostrado una notable falta de ecuanimidad en su sentido de la Justicia.
Álvaro Martínez, en ABC, entiende que el PP, en el caso de Pedro Antonio Sánchez, ha calcado a la perfección esa máxima de ‘estos son mis principios y si no le gustan, tengo otros’:
El PP traga, pues consiente la caída murciana pese a reconocer que es injusta. Lo de Groucho y los principios…
Ignacio Camacho subraya que Rajoy ha cambiado de parecer en cuanto olió que podía quedarse sin el Gobierno de Murcia:
El límite no es la imputación ni el juicio oral sino el momento en que peligre un pacto de investidura. Principios móviles, retráctiles, tornadizos.
El editorial de La Razón entiende que el vencedor moral es el dimisionario presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez:
No debería Ciudadanos cantar victoria con la dimisión del presidente del Gobierno autónomo de Murcia. A poco que reflexionen en el partido naranja, comprenderán que de haber un vencedor en todo este episodio, sólo puede ser el político que ha decidido anteponer los intereses generales de sus conciudadanos a los propios.
Para Iñaki Zaragüeta el error de base viene en la promesa de Pedro Antonio Sánchez de dejar el sillón en el caso de ser imputado:
El compromiso de dimitir en caso de ser imputado fue quizá el error principal del presidente de la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez.