Otra pala de mierda y esta apesta.
Porque llega además por el lado que más duele al acorralado amo del PSOE: la ‘catedratica’ Begoña Gómez.
El caso Koldo continúa sorprendiendo. Koldo García Izaguirre, el exasesor de José Luis Ábalos que fue encarcelado provisionalmente hace pocos días, ha dado una entrevista exclusiva a OKdiario en la que desvela nuevos pormenores acerca del rescate de Air Europa, que ascendió a 475 millones de euros y fue aprobado por el Gobierno en noviembre de 2020.
Sus declaraciones añaden un nuevo episodio a una historia que ya ha conmocionado los cimientos de la administración pública española, manteniendo bajo investigación judicial a Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez.
La relevancia del testimonio de Koldo radica en su afirmación de haber sido testigo directo de conversaciones donde la familia Hidalgo, propietaria de la aerolínea, debatió cómo compensar económicamente a la esposa del presidente por su intervención en el proceso de rescate.
Según lo relatado por el exasesor, estas discusiones no fueron fruto del azar ni improvisadas, sino que tuvieron lugar en encuentros formales en la residencia familiar de los Hidalgo situada en Puerta de Hierro, en las afueras de Madrid. Koldo admite haber visitado esa casa alrededor de dieciséis veces durante el periodo en el que se negociaba y ejecutaba el rescate. «Me hubiera gustado no estar, pero estuve y lo escuché», confiesa con un tono resignado en la entrevista.
El testigo incómodo en Puerta de Hierro
El relato de Koldo sobre sus visitas a la casa de los Hidalgo resulta especialmente relevante porque le coloca como testigo presencial de negociaciones que, si se confirman sus afirmaciones, podrían constituir pruebas clave en la investigación emprendida por la Fiscalía Anticorrupción. Durante esas visitas, donde participaba Javier Hidalgo —hijo del fundador de la aerolínea— y ocasionalmente otras personas identificadas como abogados o directivos, se discutieron aspectos fundamentales del rescate. Lo crucial es que el exasesor del antiguo ministro de Transportes asegura haber escuchado cómo se planteaba la necesidad de «compensar el buen trato que había dado la señora Begoña». Las cifras mencionadas variaban entre 100.000 euros al principio, pasando por 200.000 euros, hasta alcanzar un millón. «Comenzaron hablando, si no me equivoco, de 100.000 o 200.000 euros hasta llegar a un millón», precisa Koldo.
Lo que distingue el relato de Koldo es su énfasis en ser un observador directo. No son rumores ni informaciones indirectas; se trata de encuentros donde, según su propio testimonio, estuvo presente físicamente. Javier Hidalgo no escatimaba en expresar abiertamente la necesidad de reconocer la intervención de Begoña Gómez en la gestión del rescate. Este aspecto es crucial porque convierte la supuesta intervención de la esposa del presidente en algo no especulativo, sino reconocido explícitamente por la propia familia Hidalgo como un factor determinante.

La presión brutal y el rol de Sánchez
Koldo describe el proceso negociador del rescate como extraordinariamente intenso. «Ha sido muy polémico y muy costoso, tanto a nivel laboral como con una presión absolutamente brutal», comenta durante su entrevista. El exasesor reconoce que aunque el rescate era responsabilidad del Ministerio de Hacienda, desde el Ministerio de Transportes dirigido por Ábalos se ofrecía un apoyo esencial para facilitar que esta operación pudiera llevarse a cabo. En este marco, Koldo revela un dato relevante: Sánchez solía llamar frecuentemente a Ábalos para abordar esta situación. «El presidente llamaba mucho al señor José Luis Ábalos», indica Koldo. Aunque él mismo no participó directamente en esas llamadas telefónicas, asegura que por los comentarios que escuchaba quedaba claro: había que gestionar bien el problema.
Esta información complementa lo conocido gracias a las filtraciones sobre mensajes enviados por WhatsApp entre Sánchez y Ábalos. En efecto, el 8 de septiembre de 2020, el presidente reenvió a su entonces número dos una nota donde pedía «darle una vuelta» al asunto del rescate. Sánchez escribió: «Creo que merece la pena que le demos una vuelta» y luego añadió: «A mí la operación de IAG, salvo que me convenzas lo contrario, no me convence». Esta intervención directa del presidente ocurrió tan solo cinco días después de que Javier Hidalgo realizara una llamada a Begoña Gómez para solicitar apoyo en las gestiones relacionadas con el rescate.
El eslabón perdido: De Aldama a Koldo
La cadena intermedia involucrada en este asunto resulta tan importante como los hechos mismos. Víctor de Aldama, comisionista y asesor vinculado a Globalia (la matriz propietaria Air Europa), fue quien supuestamente informó a Koldo sobre cómo Javier Hidalgo había contactado con Begoña Gómez porque estaba «muy preocupado» por lo sucedido con su aerolínea. Aldama también está bajo investigación dentro del caso Koldo y actuaba como nexo entre los intereses familiares y los canales gubernamentales. Por su parte, Koldo ocupaba una posición estratégica como asesor cercano a Ábalos, lo cual le permitía acceder a información valiosa y participar activamente en negociaciones relevantes.
Lo notable aquí es cómo el testimonio convierte al exasesor en un testigo presente en diversos eslabones clave. No solo estuvo presente durante las conversaciones en casa dos Hidalgo; también recibió información crucial sobre las gestiones hechas con Begoña Gómez y observó cómo Sánchez intervenía directamente mediante instrucciones dirigidas a Ábalos respecto al rescate. Esta variedad desde donde Koldo ha presenciado los hechos le otorga un peso probatorio considerable, aunque también plantea interrogantes sobre su propia implicación.
La cuestión sobre las compensaciones
Uno de los puntos más delicados del testimonio involucra si hubo compensaciones económicas reales más allá del debate verbal. Al ser cuestionado directamente sobre si se realizó algún pago concreto, Koldo opta por una respuesta evasiva: «No sé exactamente cómo lo hicieron pero empezaron hablando, si no me equivoco, desde 100 o 200 mil euros hasta llegar al millón». Luego añade: «Hablaban muy seriamente». Sin embargo, cuando se le pregunta si también hubo alguna forma compensatoria para el presidente Sánchez, responde rotundamente: «Yo no oí nada acerca del señor Pedro». Esta precisión es relevante porque implica que cualquier compensación estaría dirigida exclusivamente hacia Begoña Gómez.
La Fiscalía Anticorrupción, ya antes había señalado posibles delitos relacionados con cohecho dentro esta operación investigativa. El fiscal Luzón advirtió sobre cómo “más allá”de lo oportuno o procedente del rescate”, Ábalos actuó atendiendo intereses vinculados al conseguidor Aldama debido a “la connivencia” existente entre ellos dos. Es decir, sin entrar en valorar si era correcto o no afrontar dicho rescate por parte del Gobierno, quedó claro que fue impulsado por el exministro con miras a satisfacer intereses ajenos al servicio público. Como ocurre con todo presunto delito relacionado al cohecho siempre hay alguna expectativa detrás; Aldama comunicó a Koldo: “esto sale gratis por las molestias generadas”, frase sugiriendo expectativas más allá meramente políticas.
