La formación liderada por Mariano Rajoy ha multiplicado por seis su ventaja sobre la del presidente del Gobierno
El PP sigue poniendo tierra de por medio en las encuestas respecto al PSOE. Si hoy se volviera a citar a los ciudadanos a las urnas, el resultado sería que el 43,59 por ciento optaría por el Partido Popular mientras que sólo el 37,6 revalidaría su confianza en el PSOE, que en dos años de mandato habría perdido siete puntos, lo que se traduce en casi dos millones de votos.
Así se desprende de la encuesta de NC Report para el diario La Razón que muestra que en abril de 2009, primera vez que el PP superó a los socialistas en intención de voto, la ventaja de los populares era sólo de un 0,9 por ciento. Es decir, en el último año, la formación liderada por Mariano Rajoy ha multiplicado por seis su ventaja sobre la del presidente del Gobierno.
Según informa D. Mazón -El PP multiplica por seis la ventaja con el PSOE en un año- las urnas otorgarían a los populares una representación en el Congreso de los Diputados de entre 167 y 169 escaños, mientras que su principal contrincante estaría en el arco de 147 a 149 representantes, veinte menos que los que obtuvo en los comicios de 2008. Así, el Partido Popular tendría aún lejos (siete escaños) la mayoría absoluta, por lo que tendría que apoyarse en otras formaciones para poder gobernar.
CIU, LA MEJOR POSICIONADA
La mejor posicionada para este escenario según la encuesta sería CiU, que pese a quedarse con sólo el 3,4 por ciento de los sufragios lograría entre 11 y 12 diputados, creciendo respecto a las elecciones de 2008, cuando obtuvo 10. Otra opción sería el PNV, que repetiría los seis representantes de la última cita electoral. A Rosa Díez, líder de UPyD, la acompañarían en su soledad parlamentaria otro u otros dos compañeros de partido, junto a los dos diputados que tendrían ERC, BNG y Coalición Canaria y el único que obtendría Nafarroa Bai.
IZQUIERDA UNIDA RENACE
Capítulo aparte merece Izquierda Unida. Tras años y años cayendo en picado y perdiendo representación vería cómo el descalabro del Partido Socialista beneficiaría a su agónico devenir, que en las últimas generales los dejó con dos diputados. De celebrarse elecciones hoy alcanzaría los 7 u 8 representantes, y eso pese a que lograría un 5,7 de los sufragios, 2,3 puntos por encima de CiU y 4,5 más que el Partido Nacionalista Vasco.
Con este panorama, si el PSOE quisiera revalidar su mandato, tendría que pactar hasta con cuatro formaciones políticas y siempre que lograra convencer a CiU de que los apoyara. Al Partido Popular le bastaría el apoyo de los nacionalistas catalanes.