No hay nadie como él. Fernando Sánchez Dragó ha dado un triple salto mortal es su excéntrica personalidad y ha revolucionado internet retransmitiendo en directo el nacimiento de su cuarto hijo y ayudando en el parto a su mujer. El lugar no era otro que el salón de su casa. Brutal.
El 19 de septiembre de 2012, el mismo día que se anunció el embarazo de Shakira, fue el mismo en el que el periódico El Mundo publicó uno de los artículos más provocadores y extraños que hemos visto en los últimos meses. En él, el escritor, filósofo y presentador de Telemadrid, Fernández Sánchez Dragó relata cómo ayudó a nacer a su cuarto hijo. Su séptima esposa, Naoko, dio a luz de manera natural y en el salón de su casa.
Dragó acompaña el texto –Akela, tú y yo, cachorro de hombre, somos de la misma sangre– con un álbum de fotos que retratan el momento. La mejor es sin duda, aquella que retrata el parto en sí, en la que Naoko está abierta de piernas en el suelo, apoyando la espalda sobre el regazo de Ayanta, hija de Dragó, mientras que a su lado, el presentador escribe en el móvil.
Sánchez dragó describe así el momento:
Escribo atropellado. Apenas he dormido. El domingo 16 de septiembre, mientras José Tomás se encerraba con seis toros en el anfiteatro de Nimes, nació mi cuarto y último hijo. Hubiera preferido que lo hiciese en octubre para ser Libra, como su padre, pero no se manda en tales cosas.
Ignoraba yo, hasta que vino al mundo, si sería niño o niña, azul o rosa, como se decía antes. Salió varón. No lo supe hasta que le vi el pito. ¿Como antes? Pues sí, como antes, ya que mi mujer se empeñó en que naciera en casa, con comadrona y sin ginecólogo ni medicalización alguna.
Todo salió bien, aunque la casa se llenó de enseres y de mujeres: seis llegué a contar, incluyendo a la parturienta y excluyendo a mi gata Damisela, que no perdió ripio. Un gineceo. Los tres gatos machos y yo, al principio, no sabíamos dónde meternos. Luego reaccioné, puse manos a la obra, me acomodé a dos palmos del ojo del tifón de los acontecimientos, encaré como José Tomás el hoyo de las agujas, seguí minuto a minuto el parto de frente y por derecho durante muchas horas, toqué la cabecita del niño en cuanto la tapa del cráneo apareció en el extremo de la vagina y corté su cordón umbilical con un puñalillo que me facilitaron las parteras sin dañar las partes nobles del recién nacido.
Los gatos también andaban por allí, mirándolo todo, ronroneando y transmitiendo paz, armonía, serenidad y gracia a la mujer que estaba a punto de convertirse en madre. Noriko, una amiga suya, japonesa, lo filmó todo: un largometraje, más bien un serial.
En otras fotos podemos ver al recién nacido, al que Dragó describe así:
Tira a japonés: nariz chata, ojos rasgados. Aún no sé si en su rabadilla se dibuja la mancha azul de los mongoles.
El niño se llamará Akela, como el lobo jefe de la manada de Seoonee que acogió a Mowgli. Esa palabra, en hindi, significa solitario, pero eso no le impedirá acudir al Consejo de la Roca, como lo hacía su homónimo, cuando las circunstancias lo exijan.
El escritor admite, además, que era «reticente» a tener un hijo a «su edad» pero que, finalmente, «todo ha sido emocionante» y que se siente totalmente «contento». Y por último, Dragó manda un mensaje a su retoño:
Tú y yo, ranita, cachorrillo, somos de la misma sangre, como Kaa, como Baloo, como Bagheera, como el Hermano Gris… Cuida de tu madre cuando te quedes huérfano de padre, aunque sea éste quien siga, de momento, velando por toda la manada desde lo alto de la Roca. ¡Que el favor de los vientos te acompañe, las velas de la vida te conduzcan y la Ley de la Selva te proteja!
TWITTER SE INCENDIA
Como era de esperar, el artículo causó un impacto absoluto en las redes sociales. En muy poco tiempo, el tema fue Trending Topic y los comentarios caminaron entre la burla, la crítica e incluso el disgusto: entre los cientos de tuits que se publicaron destacamos:
Crees que lo has visto todo en la vida hasta que te encuentras pariendo a la mujer de Sánchez Dragó
‘Madre mía. Y Sánchez Dragó reproduciéndose. Ahora lamento haberme reído de los Mayas’
En qué momento hice click en las fotos de la mujer de Sánchez Dragó pariendo. En serio… ¿qué necesidad? Estáis a tiempo, no lo hagáis’.
‘Decidle a Sánchez Dragó que, sin quitarle mérito, hubiésemos preferido la versión de la cigüeña. Ésa sí que es tradicional.’
Creo que Sánchez Dragó cuenta y enseña demasiado, no? La historia es chula, pero demasiado gráfica ‘
Es que imaginad que lo primero que veis en vuestra vida es la cara de Sánchez Dragó. En serio, pensadlo
Sánchez Dragó me parece un tipo admirable. Debe ser la única persona que aplica los tuits de autoayuda que escribís algunos. Padre otra vez
‘Los famosos recurren a la justicia para protegerse del objetivo de nuestras cámaras. Pero quién nos protege a nosotros de sus fotos?